Una fuente cercana a la pareja habría asegurado que la exactriz ha dicho que "bajo ninguna circunstancia está de acuerdo con que Harry viaje a cualquier parte en este momento". Un viaje que sería casi imposible teniendo en cuenta varios factores actuales, como el cierre de las fronteras de Canadá o las medidas médicas de prevención que aíslan al Príncipe Carlos de cualquier contacto con el exterior para evitar los contagios. En este caso se acusa a Meghan Markle de impedir que un hijo esté con su padre, pero en realidad le están acusando de ser una ciudadana responsable que evita un viaje innecesario.
El hijo de la Reina Isabel se encuentra con la Duquesa de Cornualles, aunque en estancias separadas, en Balmoral, Escocia, donde permanecen aislados desde que el Príncipe Carlos notó los primeros síntomas de la enfermedad. Por otro lado, el Príncipe Harry y Meghan Markle están en su mansión de Vancouver junto a su hijo Archie, donde también se encuentran confinados.
Muy preocupado por su familia
Además, esta fuente ha asegurado que esta crisis sanitaria ha acercado a todos los miembros de la Familia Real Británica, "en especial al Príncipe Harry y su hermano, el Príncipe Guillermo, con quien se ha estado comunicando de manera constante durante estos días", sintiéndose el Duque de Sussex muy agradecido por haber podido pasar tiempo con su familiar antes de que "comenzase esta locura".