El Día de la Hispanidad 2013 ha sido el año de cambios más importante desde que se institucionalizó la Fiesta Nacional en 1987. La razón ha sido que el desfile militar ha estado presidido por los Príncipes de Asturias al no contar con la presencia de los Reyes de España, un hecho sin precedentes hasta la fecha.
Pasadas las 10:30 horas llegaba la comitiva en la que viajaban los Príncipes de Asturias. Don Felipe eligió para el acto el uniforme de teniente coronel del Ejército, mientras que la Princesa Letizia lució un elegante vestido estampado color vino y chaqueta rosa.
Ni 'Vivas' ni inclinación de la bandera
Tras los protocolarios saludos, los Príncipes se han dirigido al estrado para escuchar una versión abreviada del himno nacional, ya que al estar ausente el Jefe del Estado se opta por esta modalidad. Esta ha sido una de las novedades que ha traído que el desfile haya sido presidida por el Heredero. Otras han sido que ni ha habido salvas de ordenanza, ni gritos de '¡Viva España!' por parte del ejército, ni tampoco se ha inclinado la bandera al saludo del Príncipe.
Lo que no ha cambiado ha sido el homenaje a la bandera y a los caídos por España, ni tampoco el desfile en sí, que en este 2013 ha salido desde la glorieta de Carlos V (Atocha) y ha finalizado en Colón, pasando por la tribuna real y de autoridades, colocada en la Plaza Cánovas del Castillo. Pese a la austeridad del solemne acto, no ha faltado el paso de la Patrulla Águila, que ha teñido el cielo con los colores de la bandera de España.
El desfile ha finalizado hacia las 11:30 horas, con lo que los actos centrales de la Fiesta Nacional han tenido una duración de una hora. Superado con éxito el primer desfile militar del 12 de octubre presidido por el Príncipe de Asturias, Don Felipe y Doña Letizia se han dirigido al Palacio Real de Madrid para participar en la tradicional recepción a autoridades y personalidades, donde se les unen la Reina Sofía y la Infanta Elena.