Los Príncipes Don Felipe y Doña Letizia viajaron a Londres el lunes 7 de noviembre en un día repleto de actos oficiales en los que se convirtieron en los mejores embajadores de España en Gran Bretaña. El motivo de este viaje a la capital británica ha sido apoyar las relaciones comerciales entre ambos países, teniendo en cuenta que Reino Unido es el quinto destino de las exportaciones españolas.
Tras esta visita a una de las ferias del turismo más importantes en el mundo, los Príncipes de Asturias mantuvieron un almuerzo de trabajo con directivos de los principales operadores turísticos británicos con representación en el mercado español. En este encuentro estuvieron los presidentes de Gobierno de Canarias, de las Illes Balears y de la Generalitat Valenciana, el embajador de España en el Reino Unido, el secretario general de Turismo y Comercio Interior, y otras autoridades de las Comunidades Autónomas.
Miriam González, entre los invitados a la cena
Después de la comida en el restaurante Plateau, en Canary Wharf, Don Felipe acudió al primer Foro Económico bilateral entre los líderes empresariales y políticos de España y Reino Unido. Esto fue en el Hotel Landmark y se trató de un acto organizado por la Cámara Oficial de Comercio de España en Gran Bretaña. Su Alteza Real ofreció unas palabras a los presentes en este foro y entre ellos a algunos de los representantes de empresas españolas en ese país-.
El día ha finalizado con la entrega de las acreditaciones a los 'Amigos de la Marca España en el Reino Unido', así como la cena conmemorativa del 125 aniversario de la Cámara Oficial de Comercio de España en Gran Bretaña. El acto, al que asistió la viceprimera dama del Reino Unido, la vallisoletana Miriam González Durántez, ha tenido lugar en el Hotel Landmark, de Londres, y en él, Don Felipe ha ofrecido un discurso en el que ha hablado de la gran labor de la cámara en estos años de vida.
Doña Letizia, para este intenso día de trabajo en la capital británica, eligió un ajustado vestido gris (con el que ya habíamos podido ver a la Princesa en otras ocasiones), sencillo y elegante, a juego con los zapatos para llevar por el día. También Don Felipe eligió el gris para su atuendo en esta jornada en la que ha demostrado ser el mejor embajador del turismo y la economía de España en Gran Bretaña. Ya por la noche, la Princesa cambió su vestido gris por uno negro, un modelo que lució por primera vez en la entrega de los Premios Príncipe de Asturias 2010, y su larga melena por un recogido en un favorecedor moño con el que cautivó durante su estancia en Reino Unido.