Los príncipes Federico y Mary de Dinamarca están a punto de terminar su viaje oficial por Groenlandia, en el que han disfrutado de grandes momentos acompañados por sus hijos. Unas vacaciones de verano atípicas en la isla más grande del mundo.
Una de las últimas paradas de su viaje ha tenido lugar en la ciudad costera de Qaqortoq, donde han llegado subidos en barco. Lo curioso del momento fue que la familia apostó por los trajes típicos de Groenlandia, blanco para ellos y colorido para ellas. Sus hijos, Isabel, Christian, Josefina y Vicente tampoco quisieron perder la oportunidad de lucir estos curiosos atuendos tradicionales, siendo este último el que mejor parecía estar pasándolo con sus tupidos pantalones.
A lo largo de su viaje han visitado localidades diferentes de la vasta isla, desde Igaliko a Paamiut. En todas ellas han sido recibidos con muchísimo cariño por parte de sus habitantes. El plan de actividades ha sido de lo más completo, y los hijos mayores del matrimonio han disfrutado de lo lindo con ellas.
Los mellizos derriten el hielo de Groenlandia
Pero los que han robado toda la atención han sido los mellizos. A pesar de ser todavía muy pequeños, Vicente y Josefina cada vez son más partícipes de los actos oficiales, y cuentan con la divertida espontaneidad de los infantes, como el momento en el que Josefina pidió permiso para darle un beso en la mejilla a un bebé en Paamiut. Una familia de foto.