El Príncipe Alberto II de Mónaco y Charlene Wittstock ya son marido y mujer a los ojos de Dios. El enlace religioso ha tuvo lugar a las 17:00 horas en el Patio Principal del Palacio Principesco ante 3.500 invitados. La ceremonia, oficiada por el arzobispo de Mónaco, Bernard Barsi, ha tenido en la música un elemento fundamental, ya que ha acompañado la mayor parte de los bellos momentos vividos durante el enlace religioso.
La deslumbrante nueva Princesa de Mónaco ha acertado en el Armani que ha portado, un maravilloso vestido blanco con seda bordada y flores con cristales de Swarovsky y perlas doradas. La sudafricana, que ha desechado las joyas y la tradicional tiara, ha llevado con estilo un ramo realizado con orquídeas y rosas que depositó en la Iglesia de Sainte Dévote.
El rotundo "sí quiero" de Alberto de Mónaco y Charlene Wittstock
El enlace se ha desarrollado a lo largo de una hora y cuarto. Nada más comenzar se ha subido al estrado Pauline Ducruet, hija de la Princesa Estefanía, que ha leído unos salmos. Posteriormente, ha sido la bellísima Carlota Casiraghi la que ha entonado unas frases de las sagradas escrituras.
A las 17:30 horas la regia pareja ha consentido, se han dado la mano de forma cariñosa y ambos han lanzado un 'Sí' rotundo. Inmediatamente después, la hija pequeña de la Princesa Carolina, Alexandra de Hannover, ha entregado los anillos a los Príncipes. Primero se lo ha puesto él, y después ha sido ella la que le ha colocado la alianza, estallando de felicidad tras saberse esposa de Alberto II de Mónaco.
50 minutos después del comienzo del enlace, Charlene se ha retirado el velo y los Príncipes se han besado tímidamente, siendo este uno de los momentos culminantes de una boda un tanto rígida que ha llenado de luz, color y de vida el Principado, ya que más de medio millón de personas se encuentran en las calles de Monte-Carlo para celebrar que vuelven a tener Princesa.
Los Príncipes han sentido el calor de su pueblo cuando han salido de Palacio convertidos en marido y mujer rodeados de pétalos de rosa lanzados por invitados y asistentes mientras se oía un rodoble de campanas.
Alberto y Charlene se han montado en el vehículo patrocinado elegido para la ocasión que les llevó a la pequeña y bella Iglesia de Santa Devota, donde los novios han sido recibidos bajo vítores por los que allí se han dado cita para recibirles. Una vez en el interior del templo han sido agasajados con una hermosa canción que ha emocionado a la Princesa hasta el punto de que ha roto a llorar de felicidad, para después entregar el ramo como marca la tradición monegasca.
Carlota Casiraghi, Carolina y Estefanía de Mónaco eligen el rosa pastel
Los novios han contado con la presencia de miles de invitados que han querido estar con los contrayentes en el día más importante de su vida. Entre ellos ha habido Reyes, príncipes y princesas, condes, duques, Jefes de Estado, modelos, deportistas y cantantes.
Los más esperados y elegantes han sido los Grimaldi, que han acudido en pleno para ver casar al cabeza de familia. Los primeros en llegar fueron los tres hermanos Casiraghi, que asistieron junto a sus parejas.
Andrea Casiraghi se vistió de chaqué, mientras que su novia, Tatiana Santo Domingo fue la menos acertada con un vestido violeta y un gorro beige poco favorecedor. Carlota Casiraghi, que estuvo acompañada por Alex Dellal, elegió un Chanel de color rosa pastel con atrevidos complementos y tocado de rejilla que le convirtieron en la más bella y radiante de las invitadas. Finalmente, Pierre Casiraghi y Beatriz Borromeo deslumbraron con sus atuendos.
Un poco más tarde hicieron su aparición las Princesas Carolina y Estefanía, ambas vestidas del mismo color que Carlota, aunque con estilos diferentes. La primogénita de Rainiero III y Grace Kelly volvió a optar por la pamela, a juego con el vestido, mientras que Estefanía eligió un chal como complemento.
Para caminar hacia Palacio comenzaron el cortejo Louis Ducruet y Estefanía de Mónaco, muy orgullosa de su primogénito, seguidos de sus dos hijas Pauline y Camille, mientras que las últimas fueron Carolina de Mónaco y su cuarta descendiente, la Princesa Alexandra de Hannover.
Todas las Casas Reales reinantes Europeas representadas salvo la española
Pese a que ningún miembro de la Casa Real Española acudió al enlace, como tampoco lo hicieron las Casas Griega y Búlgara, el resto de las Familias Reales Europeas enviaron representantes. A la ceremonia religiosa acudieron los Príncipes Federico y Mary de Dinamarca, así como los Príncipes Joaquín y Marie, todos ellos en representación de la Reina Margarita.
También estuvieron Haakon y Mette-Marit de Noruega, los Grandes Duques de Luxemburgo, los Reyes Alberto y Paola de Bélgica, que estuvieron acompañados de los Príncipes Herederos Felipe y Matilde, los Príncipes Guillermo y Máxima de Holanda y la Familia Real Sueca al completo, desde los Reyes Carlos XVI Gustavo y Silvia, pasando por los Príncipes Herederos Victoria y Daniel y los Príncipes Carlos Felipe y Magdalena.
En nombre de la Reina Isabel II del Reino Unido acudieron los Duques de Kent, primos de la Soberana, y el Príncipe Eduardo de Inglaterra y Sophie Rhys-Jones, Condes de Wessex, que se desplazaron a Mónaco mientras los Duques de Cambridge se encuentran de visita oficial en Canadá.
Entre las casas no reinantes estuvieron Emmanuel y Marina de Italia y Filiberto de Saboya y Clotilde Courau, la Gran Duquesa María de Rusia, los Príncipes de Yugoslavia, los Duques de Braganza y Luis Alfonso de Borbón y Margarita Vargas, que acudieron como Duques de Anjou, siendo una de las ramas pretendientes al Trono de Francia.
Pero no solo fueron 'royals' al esperado enlace, puesto que por el Palacio del Príncipe desfilaron las modelos Naomi Campbell, Karolina Kurkova y Victoria Silvstedt, los diseñadores Giorgio Armani, que diseñó el traje de la novia, y Karl Lagerfeld, el músico Jean Michel Jarre, que ofreció un concierto tras la boda civil de Alberto y Charlene de Mónaco, Ines de la Fressange, el actor Roger Moore y el Presidente de la República de Francia, Nicolas Sarkozy, que no estuvo acompañado por la Primera Dama, Carla Bruni, en esta boda de ensueño que culminará esta medianoche con un espectáculo de fuegos artificiales.