EN DURBAN

Los Príncipes Alberto y Charlene de Mónaco celebran una fiesta en Sudáfrica para festejar su boda

Alberto II y su esposa han ofrecido una celebración a 500 invitados en el país natal de la Princesa. Además, la pareja realizó una aparición en la que se dieron un tierno y sincero beso como prueba del gran amor que se profesan.

Guillermo Álvarez-Duque 08 Julio 2011 en Bekia

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Los Príncipes Alberto y Charlene de Mónaco han ofrecido una lujosa recepción en la ciudad sudafricana de Durban para 500 invitados, entre ellos los miembros del COI que se encontraban reunidos en la ciudad esta semana.

Los recién casados viajaron al país de origen de Charlene y se alojaron a 15 kilómetros de Durban, en el hotel Oyster Box, donde ocupan una suite presidencial que cuesta 5.100 euros por noche y donde ya han podido disfrutar de su recién estrenado matrimonio sin obligaciones laborales.

Antes de reunirse con sus anfitriones, la pareja hizo una breve aparición en la entrada del hotel e intercambiaron un sincero beso para deleite de los medios allí congregados. Alberto II vestía traje negro y corbata roja, mientras que la princesa llevaba un elegante y largo vestido negro sin mangas con diseño de inspiración africana.

Alberto y Charlene de Mónaco, luna de miel trabajando

Tras el enlace religioso que unió a Alberto y Charlene en sagrado matrimonio el pasado sábado en el Palacio del Príncipe en Monte-Carlo y la posterior celebración, los Príncipes de Mónaco partieron hacia Sudáfrica para iniciar su luna de miel trabajando, ya que el Soberano participó en la reunión del Comité Olímpico Internacional que designó a la ciudad coreana de PyeongChang como sede de los Juegos Olímpico de Invierno 2018.

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