El Duque de Sussex tiene claro lo que desea, si bien es cierto que sea cual sea el sexo del bebé,
El viaje oficial de los Duques de Sussex por Australia está dando para mucho. El desplazamiento contaba con gran expectación al ser el primero que realizaban el Príncipe Harry y Meghan Markle a Oceanía desde su boda, a lo que se sumó que nada más aterrizar en Sydney, Kensington Palace anunció que están esperando su primer hijo.Aunque sea el primero, es posible que haya preferencias con respecto al sexo del bebé, y en el caso del Príncipe Harry, las tiene. O al menos eso ha quedado claro en una competición ciclista de los Invictus Games de Sydney, evento que el Duque de Sussex ha querido apoyar.
Una fan le gritó que tenía la esperanza de que el bebé real que nacerá en primavera de 2019 sea una niña. El Príncipe Harry contestó que él también lo espera, así que parece que le haría ilusión que su primogénito sea una niña. Así, el Príncipe de Gales tendría dos nietos y dos nietas, ya que los Duques de Cambridge tienen dos niños y una niña.De todos modos, hasta que no se produzca el nacimiento no habrá comunicación sobre el sexo del bebé, un niño que sea lo que sea ya estará lejos en la línea de sucesión, pero que como descendiente directo del Príncipe Harry tendrá tratamiento de Alteza Real y dignidad de Príncipe o Princesa de Sussex.
Meghan Markle se toma un respiro
Por otro lado, y aunque ha intentado estar al pie del cañón desde que comenzó el intenso tour que está realizando por Oceanía, Meghan Markle no pudo más y canceló su presencia a un acto relacionado con los Invictus Games. Las primeras semanas del embarazo pueden ser duras, y aunque la Duquesa de Sussex lo está llevando bien, al final ha tenido que tomarse un pequeño descanso.