Este viernes, el Príncipe llegó a Brasil, donde realizó diversos actos para confraternizar con la población carioca en una visita que ha servido para estrechar las relaciones diplomáticas y comerciales entre el Reino Unido y el país sudamericano que preside Dilma Rousseff.
También participó en una carrera de atletismo para promocionar los Juegos Olímpicos que se celebrarán este verano en Londres y donde se atrevió a llevar una careta con la cara del Príncipe Guillermo que le prestaron, demostrando el buen sentido del humor del que goza Enrique de Gales.
Enrique de Inglaterra en Jamaica
Asimismo, Harry se batió en duelo con el hombre más rápido del mundo, y es que el hijo menor del Príncipe Carlos y de Diana de Gales retó al jamaicano Usain Bolt a correr los 100 metros lisos. No obstante, lo que Bolt desconocía es que Harry se guardaba un as en la manga; así, el Príncipe británico hizo trampa y salió antes de que el juez diera el pistoletazo de salida. De esta forma, el nieto de la Reina puede presumir de haber 'ganado' al hombre más rápido del mundo. Lejos de molestarse, el atleta se tomó la anécdota con humor y posteriormente ambos mantuvieron una divertida charla.
Asimismo, el Príncipe mostró su vena más divertida con el baile que se marcó con una joven del grupo de danza de la ONG Rise en Kingston, capital de Jamaica, donde con total naturalidad demostró que sabe moverse a buen ritmo, lo que le valió la simpatía de los allí presentes.
Pero no todo iban a ser visitas distendidas, pues el Príncipe Enrique también tuvo su acto protocolario con la visita que realizó a la Primera Ministra de Jamaica, Portia Simpson, quien le recibió con un caluroso abrazo en las escaleras de su residencia oficial, donde tras ellos se encontraba un retrato de la Reina Isabel en el que se conmemoraba el Jubileo de Diamante de la monarca.
Enrique de Gales visitó Belice y Bahamas
Antes de desembarcar en Jamaica, Harry tuvo como primera parada Belice. Allí fue recibido con bailes tradicionales, banderas, música, collares típicos. Una calurosa y divertida bienvenida a la que el nieto de la Reina de Inglaterra respondió marcándose unos bailes por las calles de la capital Belmopan y probando la comida y bebida que le iban ofreciendo mientras ofrecía la mejor de sus sonrisas.
Y antes de marcharse a su segundo destino, donde se reunió con Arthur Foulkes, Gobernador de Bahamas, y recibió un retrato suyo, Harry de Inglaterra descubrió una placa de la calle que lleva su nombre.
Enrique de Gales también ha visitado la isla de Nassau, hasta donde llegó en una lancha. Después de pasar unos divertidos momentos con un grupo de niños que le esperaban, Harry de Inglaterra se vistió de gala para participar en un servicio religioso en el que volvió a recibir el calor de todos los presentes.