El Príncipe Harry ya ha comenzado a celebrar su 39 cumpleaños después de su paso por los Juegos Invictus por Alemania junto a su mujer, Meghan Markle. El hijo del Príncipe Carlos de Inglaterra se ha anticipado a su día, saliendo a disfrutar de una comida privada junto a sus personas más cercanas. Los dos fueron vistos en un restaurante en el centro de Dusseldorf llamado 'Im Goldenen Kessel', que pertenece en parte a Brauerei Schumacher.
El Príncipe Harry y Meghan Markle, felices y de la mano en los Juegos InvictusLos dos no estuvieron solos, sino que contaron con parte del equipo de Archevell. Un miembro del personal del restaurante comentó a la revista ¡Hola! que sobre todo el Príncipe fue muy generoso y agradecido. También la propietaria del local, Thea Ungermann, se ha pronunciado diciendo: " La pareja estaba muy relajada, bebieron nuestra cerveza, Schumacher Alt; es la misma cerveza que sirven en los Juegos Invictus. Harry y Meghan se sentaron uno al lado del otro durante la comida. Se me puso la piel de gallina cuando entré al restaurante, había visto su discurso en el escenario de los Invictus Games y no podía creer que estuviera en mi restaurante. El Príncipe Harry fue tan encantador y me dio un abrazo".
Parece ser que desde que los dos llegaron a Alemania por los Juegos Invictus esta era la primera noche que salían del hotel para cenar en un otro restaurante. Y fue una vez llegaron al hotel cuando el Príncipe Harry fue felicitado, recibiendo algunos pasteles.
El Príncipe Harry y Meghan Markle, emocionados de la mano en los Juegos InvictusEsta salida del matrimonio ha tenido lugar después de un día muy ajetreado para ambos, ya que se han reunido con los representantes de la OTAN. Además, vieron a Ucrania jugar contra Nigeria en voleibol. Los dos se mostraron muy emocionados y también cómplices en esta aparición, agarrados de la mano y sonrientes, dejando claro que en su relación no existe ninguna crisis pese a los incesantes rumores que los acechan desde hace meses.
Mucho más relajados y cercanos
La Duquesa de Sussex se muestra más que cómoda en este entorno, una actitud que dista mucho de la que adopta cuando se encuentra cerca de la familia de su marido. Este tipo de compromisos más informales les dan la posibilidad de ser ellos mismos, de mostrarse más relajados y cercanos. Los grandes ausentes, eso sí, de este viaje están siendo sus dos hijos, Archie Harrison y Lilibet Diana.
