Carole Middleton, madre de Kate Middleton, celebró su 64 cumpleaños en casa de su hija Pippa Middleton. Pese a ser un acontecimiento familiar importante, a la fiesta no acudió el Príncipe Guillermo, que se quedó quedando de sus tres hijos en Kensington Palace. Si bien es cierto que es muy loable que se quede al cargo de sus vástagos, es raro que con la ayuda con la que cuentan los Duques de Cambridge, no fuera al aniversario de su suegra.
Ausencias aparte, Duquesa de Cambridge se dejó ver en la fiesta con un vestido rojo de gasa y estilo boho, creación de uno de sus diseñadores favoritos, Alexander McQueen. Kate Middleton lo había lucido en verano de 2017 en Berlín, donde lo llevó en todo su esplendor. Sin embargo, el frío de la noche londinense le obligó a lucirlo acompañado de un abrigo azul marino y unos pendientes de Simone Rocha.
Reunión de los Middleton
A la celebración también acudió el tercer hijo de la cumpleañera, James, acompañado de su novia Alizee Thevenet. La joven de 29 años ha sido un gran apoyo para el hijo de Carole tras haber hecho público en Daily Mail la depresión en la que se vio inmerso y de la que se está recuperando y el trastorno por déficit de atención que le han diagnosticado.
La misma mañana del cumpleaños, se pudo ver a Michael Middleton, marido de Carole Middleton, cargando presumidamente flores y regalos para la anfitriona. La pareja pasó una feliz velada acompañada de sus tres hijos, quienes se reunieron con motivo de esta esperada celebración.