Cuando la pandemia alcanzó de lleno a Reino Unido fue inevitable pensar, además de en todas las personas mayores y otros grupos de riesgo, en la avanzada edad de varios miembros principales de la Familia Real Británica. Ante la amenaza, la Reina Isabel dejó Buckingham Palace para instalarse en Windsor Castle, el mismo lugar al que fue trasladado el Duque de Edimburgo, que vive de forma permanente en Sandringham. El matrimonio regio ha querido reunirse para pasar juntos el aislamiento.
A pesar de la evidente preocupación debido a la edad del Príncipe de Gales, que en el momento del contagio tenía 71 años, Clarence House ha enviado un mensaje tranquilizador. El Príncipe Carlos se encuentra bien, mantiene el humor y puede seguir trabajando desde Birkhall en la medida de lo posible. Sus síntomas siguen siendo leves, aunque por supuesto está aislado para no contagiar a nadie.
Mientras los Duques de Cambridge publicaron desde Anmer Hall un vídeo de sus tres hijos aplaudiendo a los sanitarios por su lucha contra el COVID-19, el Príncipe de Gales y Camilla Parker han hecho lo propio desde Escocia. La Duquesa de Cornualles, que dio negativo en la prueba, aplaudió desde la ventana, mientras que el Príncipe Carlos lo hizo desde la habitación en la que permanece en aislamiento.
Clarence House ha divulgado un mensaje de agradecimiento del Príncipe de Gales ante las muestras de apoyo recibidas desde que se conoció que dio positivo por coronavirus. "Gracias por todos sus mensajes de 'Mejórate pronto' para Su Alteza Real. Le conmueven enormemente sus amables palabras".
Una llamada a sus hijos y sin temor por la Reina Isabel
El Príncipe Carlos comunicó por teléfono a sus hijos que había dado positivo, con el evidente disgusto de ambos. El Príncipe Guillermo recibió la noticia desde Anmer Hall, mientras que el Príncipe Harry lo hizo entre Vancouver y Los Angeles, ya que se ha conocido que los Duques de Sussex se han mudado a Estados Unidos antes de que no pudieran abandonar Canadá debido a la pandemia.
No ha habido posibilidad de contagio con sus hijos, pero sí hubo cierto riesgo con la Reina Isabel, a la que el Príncipe Carlos vio el 12 de marzo. Sin embargo, la Casa Real Británica se ha apresurado a desmentir que la Monarca haya sido afectada. Afortunadamente se encuentra en perfecto estado de salud.