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El Príncipe Andrés será despojado de su protección policial a partir de este jueves 1 de diciembre de 2022. El hijo de Isabel II y hermano del Rey Carlos III ha perdido el beneficio que le otorgaba su posición como parte de la Familia Real solo unos meses después de ser despojado de sus títulos y deberes oficiales por orden de su propia madre, que se los retiró tras conocerse la acusación de Virgina Giuffre, quien culpó al Príncipe de haber abusado sexualmente de ella hasta en tres ocasiones cuando aún era menor de edad. Este caso, sumado a la íntima relación del Príncipe Andrés con el pederasta Jeffrey Epstein, hicieron estallar la polémica entorno a la figura del tercer hijo de la Reina.
Ahora ha sido el gobierno de Rishi Sunak, Primer Ministro de Reino Unido tras Liz Truss, el que ha decidido despojarle también de sus escoltas oficiales, beneficio del que ha estado disfrutando durante todo este tiempo, algo que no le ha hecho ninguna gracia. El diario The Sun ha publicado la declaración de una fuente de Buckingham según la cual el Príncipe estaría "furioso" por la pérdida de protección e incluso habría sopesado la posibilidad de demandar al ministerio del Interior y a la Policía Metropolitana por la decisión: "Va a escribirles para quejarse de la pérdida de su seguridad".
Según esta decisión, el Príncipe Andrés tendrá que costearse su propia seguridad cada vez que salga de su residencia de Windsor, en la que vive junto a su exmujer, Sarah Ferguson. El coste de la protección de la que disfruta el hermano de Carlos III, y que es financiada en su totalidad por las arcas públicas, asciende a un gasto de tres millones de libras al año ( 3,5 millones de euros ), una cantidad a tener en cuenta y que el Príncipe Andrés tendrá que costearse él mismo a partir de ahora.
El Príncipe no es el primer miembro de la Familia Real en perder su escolta oficial. También el Príncipe Harry sufrió la misma situación tras el 'Megxit', cuando decidió dejar de formar parte como miembro activo de la Familia Real. Al rehusar de su posición, también se le retiró la escolta oficial de la que había disfrutado hasta ese momento, lo que le hizo enzarzarse en una lucha con el Ministerio del Interior en un intento de recuperar esa escolta oficial aunque fuera a través de su propia financiación, algo que por el momento no ha conseguido.
La decisión de Carlos III
Además de perder su escolta, el Príncipe Andrés también podría perder la oportunidad de sustituir a su hermano en el trono en caso de ser necesario. Carlos III ha pedido al Parlamento que sus hermanos, la Princesa Ana y el Príncipe Eduardo, sean nombrados Consejeros de Estado, de modo que puedan ser ellos quienes lo sustituyan en lugar de su hermano o su hijo, el Príncipe Harry, ambos fuera de la Casa Real.