Así mismo, el diario también ha afirmado que el monarca le mostró a Rowland documentación gubernamental confidencial y que posee una participación financiera en el banco al cual estaba intentando promover en secreto. La participación sería del 40% por lo que las intenciones del Príncipe Andrés eran lucrarse económicamente de sus privilegios como familia de la Corona.
Se destapa todo
Supuestamente el hijo de Isabel II exigió días antes de viajar una nota informativa y privada de los jefes del Tesoro sobre la crisis financiera islandesa, para luego pasarle esa información a Rowland. Casualmente, meses antes, el empresario había comprado parte de un banco islandés por 86 millones de libras. De igual forma el monarca también llevó al empresario en sus viajes oficiales y le presentó a personas ricas y poderosas como el Príncipe Sultán bin Salman bin Abulaziz al Saud, el segundo hijo del rey de Arabia Saudita.
El diario Mail on Sunday también afirma que la relación entre el empresario y el monarca era muy estrecha y que los correos que se enviaban dejaban bien claros sus intereses. Supuestamente el empresario le advirtió al Príncipe Andrés que tuviese cuidado con estas operaciones ya que tras el caso Epstein podría estar "bajo el radar", a lo que el príncipe le respondió: "Me gusta tu forma de pensar". Después de toda esta información lo que está claro es que el hijo de la Reina Isabel II ha explotado su papel como miembro de la Casa Real y enviado comercial de Gran Bretaña para beneficiar en secreto a un amigo cercano al que le unían intereses comerciales personales.