Galería: La Familia Real Belga en imágenes
El famoso barrio romano del Trastevere se ha convertido en un escenario lleno de encanto para que el Príncipe Amadeo de Bélgica diera el sí quiero ante su familia y amigos en una jornada muy especial apea la Casa Real belga. El hijo de los Príncipes Astrid y Lorenzo ya se ha convertido en el marido de Elisabetta Rosboch von Wolkenstein, más conocida como Lili Rosboch.
La periodista ha sido la gran protagonista de este enlace, que ha tenido lugar en la Basílica de Santa María, donde el cardenal Danneels ha sido el encargado de oficiar la ceremonia, con un mensaje del papa Francisco para la pareja incluido. El príncipe entraba acompañado por su madre, que ejercía de madrina, mientras que Lili Rosboch lo hacía junto a su padre, Ettore Rosboch von Wolkenstein. Ella quitó el hipo con su vestido, un diseño de Valentino.
Familia unida
Casi ningún miembro de la Familia Real se ha querido perder esta boda. Por las puertas de la basílica han ido entrando los reyes Felipe y Matilde de Bélgica, y los abuelos del novio, Alberto y Paola de Bélgica. Isabel, hija mayor de los reyes y heredera, tuvo un papel importante en la boda, ya que ejerció de dama de honor. La hermana del novio, Luisa Maria, fue quizás la única que consiguió robar un poco el protagonismo de la pareja.
Con esta bonita celebración se sella una relación de cinco años. Otra periodista que entra a formar parte de una Casa Real, aunque Lili Rosboch ya tenía sangre de aristócrata en las venas. La pareja mantiene su residencia en Nueva York, aunque corría el rumor de que pudieran estar pensando en trasladarse a Bruselas después de la boda.