Los constantes rumores sobre su posible separación y el verdadero estado de salud de la Princesa Charlene han hecho que el Príncipe Alberto de Mónaco haya querido romper su silencio y confirmar que Charlene "volverá muy pronto, tenemos que hablar con los médicos en unos días", según ha declarado en la cadena de radio RMC.
Aunque el matrimonio intenta dar una imagen de normalidad, lo cierto es que las últimas fotos de la Princesa muestran un cambio físico evidente. En este sentido, el Príncipe Alberto ha señalado que: "está mejor, aunque ha sido muy difícil para ella porque ha sufrido diferentes problemas", en un extracto del programa 'Rothen's lamme', que se emitirá de forma integra por la citada cadena, RMC.
En marzo de 2021, la Princesa se trasladó a Sudáfrica, su país natal, para asistir al funeral del Rey zulú, Zwelithini Goodwill. Realizó algunas labores de activismo en los meses posteriores. Fue allí donde se manifestó la grave infección otorrinolaringológica que le impide regresar al Principado por prescripción médica. El motivo es que la presión de sus oídos no se igualaría en el vuelo y no podría soportarlo.
Mediará en el conflicto real zulú
Aunque no esté completamente restablecida de la grave infección, la Princesa Charlene ha decidido embarcarse en un nuevo proyecto en Sudáfrica. Su objetivo será poner fin al conflicto sucesorio del trono zulú. De momento, tratará este asunto desde su país de origen, a la espera de completar su recuperación.
La amistad de la Princesa de Mónaco con el fallecido rey zulú, Zwelithini Goodwill, es el principal motivo de su ofrecimiento como mediadora. A pesar de que el papel del Rey zulú es simbólico y espiritual, la asignación anual de más de 4 millones de euros por parte del Estado, parece ser la principal causa de la disputa, en la que hay hasta cinco sospechosos de asesinato por la muerte, en extrañas circunstancias, del legítimo heredero al trono zulú. Entre los acusados se encuentran, incluso, miembros de la propia familia del Monarca.