La Princesa Magdalena y Chris O'Neill en la cena organizada por la World Childhood FoundationLa Familia Real sueca está completamente entregada con la World Childhood Foundation, organización benéfica que se encarga de recaudar fondos para diferentes causas relacionadas con la infancia y de la que es fundadora y presidenta la Reina Silvia. En más de una ocasión hemos visto a las hijas de la monarca, las princesas Victoria y Magdalena, apoyar diferentes actos de esta organización a lo largo del planeta, por lo que no podían perderse la cena benéfica que se organizó en Estocolmo.
El lujoso hotel Verns fue el lugar donde tuvo lugar el evento al que acudieron todos los miembros reales al mismo tiempo. La Princesa Magdalena optó por un vestido negro con encaje y transparencias, llegando de la mano de su marido, el empresario Chris O'Neill. La princesa trabaja para la fundación, por lo que retrasó su regreso a Nueva York, ciudad en la que vive con su marido y su hija la Princesa Leonor, para poder asistir a esta cena.
La Princesa Victoria y el Príncipe Daniel en la cena organizada por la World Childhood FoundationPor su parte, la Princesa Victoria sorprendió con vestido negro de manga corta con volantes en la falda y detalles de encaje y gasa, acompañado todo con un tocado a modo de joya y pendientes de diamantes. Tan caballeroso como de costumbre, su marido el Príncipe Daniel le sostuvo en todo momento el clutch de pedrería a su esposa para que así pudiera atender cómodamente a los medios de comunicación reunidos.
Boicot a Chuck Berry
La cena de la World Childhood Foundation ha tenido lugar poco después de que se conociera que la Reina Silvia y su hija Magdalena habían declinado la oferta de presidir los Premios Polar, unos galardones muy importantes en el mundo de la música, por contar entre sus premiados con el músico Chuck Berry, quien fuera juzgado por tráfico de menores en 1961.
La Princesa Magdalena, Chris O'Neill y la Reina Silvia en la cena organizada por la World Childhood FoundationLa monarca justificó su decisión en el periódico 'Expressen' con estas palabras: "No podía aceptar la invitación. Debía defender los derechos de la infancia como hago, diariamente, con mi fundación. Esta decisión fue comentada con el Rey y él la entendió y aceptó. Para intentar no perjudicar a los premios tanto mi hija Magdalena como yo asistimos al banquete posterior para así honrar al otro galardonado, Stig Andersson", alegó la Reina.
