Desde 2019 es ella la encargada de entregar los Premios Princesa de Asturias y preside los actos junto a los Reyes Felipe y Letizia, y acompañada por la Infanta Sofía. Viaja por tanto cada octubre a Oviedo, y además, la entrega del Premio al Pueblo Ejemplar provoca que año tras año conozca una localidad distinta de Asturias. Así, su conocimiento y cercanía de del Principado va creciendo.
Se esperaba que el acto comenzara a las 12:15 horas, y por tanto que la heredera hubiera llegado unos minutos antes, pero se fue retrasando. Con una Plaza de la Constitución de Oviedo llena de personas locales y de visitantes procedentes de otros lugares que esperaban, al igual que la Real Banda de Gaitas Ciudad de Oviedo, la Princesa de Asturias no llegó hasta las 12:25, es decir, con 10 minutos de retraso. El motivo fue que la Princesa Leonor llegó en avión desde Madrid ese mismo día, y el vuelo llevó un pequeño retraso.
Mientras sonaban las gaitas, en concreto 'Soy de Verdiciu', la Princesa Leonor, vestida de civil y con un traje azul, saludó a las autoridades, y antes de entrar en el ayuntamiento, dejó su bolso a la persona de protocolo de Casa Real y se acercó a saludar al amplio número de personas que se agolpaban en la citada plaza para ver de cerca a la heredera. Así, pese al retraso, la Princesa de Asturias quiso dar la mano a la gente al mayor número de personas posible y devolverles así su cariño.
Seguidamente accedió al ayuntamiento acompañada de las autoridades, entre ellos el Presidente de Asturias, Adrián Barbón. De este modo, el acto ha comenzado 15 minutos tarde. El Alcalde de Oviedo entregó los atributos concedidos como Alcaldesa Honoraria, consistentes en una medalla, una insignia, un diploma y el bastón de mando, al igual que recibió Don Felipe en 1988. Tras la fotografía oficial con la corporación municipal y otra con el resto de autoridades, la Alcaldesa Honoraria ha firmado en el Libro de Honor para cerrar este breve acto que se alargó después en privado.
Pasadas las 13:00 horas, y mientras sonaban las gaitas, la Princesa Leonor bajó del edificio consistorial y se acercó a la multitud para dar la mano a la gente a la que no había podido saludar cuando llegó, otro bonito detalle de la heredera con los ovetenses y visitantes que quisieron ver de cerca y saludar a la Princesa de Asturias. Pese a la falta de tiempo, algunas personas compartieron algunas palabras con ella, como una mujer de 93 años llamada Enedina, y que contó a TPA que le había dicho lo guapa que era, ante lo que la Princesa Leonor se rio.
Medalla de Asturias y discurso muy personal
Posteriormente, la Princesa Leonor se trasladó caminando al Edificio Histórico de la Universidad de Oviedo, muy cerca del ayuntamiento, donde fue recibida por el Rector de la Universidad de Oviedo y por los miembros del Gobierno del Principado de Asturias. Por el camino, siguió dando manos y saludando a la gente mientras sonreía encantada por este baño de masas y este honor que tanta ilusión le hace.
Allí, en la biblioteca de este lugar, recibió la Medalla de Asturias ante 200 invitados. Este honor , que cada año obtienen una serie de personas ilustres, en su caso le llega por ostentar el título de Princesa de Asturias. Una vez más, la Princesa Leonor sigue los pasos de su padre, Don Felipe, que recibió estos mismos honores casi cuatro décadas antes que ella.
La ceremonia comenzó a las 13:20 horas con una breve interpretación del Himno de España tocado por las gaitas. Al momento intervino el Presidente de Asturias, Adrián Barbón, que recordó que se le entrega un disco de oro de 20 mm de diámetro, que "esta entrega acumula una enorme carga histórica, el símbolo que renueva una relación de siglos entre esta tierra y la Corona". Cambió posteriormente del castellano al asturiano, lengua no oficial, pero que busca serlo, y que Barbón ha querido apoyar de esta manera.
A continuación, recibió de manos del Presidente la distinción propia de la Medalla de Asturias y ofreció un discurso muy personal en el que recordó sus viajes privados durante su infancia a Asturias, donde visitaban a su bisabuela, Menchu Álvarez del Valle. Para finalizar el acto, sonó el Himno de Asturias y tanto la Princesa Leonor como los invitados aplaudieron. Se cerró así el acto oficial, muy emotivo para la heredera en unos días muy especiales en su Asturias Patria Querida.