En 2011 la aristócrata y actriz Catherine Oxenberg acudió junto a su hija India Oxenberg a unas charlas de autoayuda organizadas por una secta neoyorquina llamada Nxvim, definida en su página web como "una organización de estructura piramidal que ofrece cursos y seminarios de desarrollo personal y profesional". En su día declararía que le pareció "espeluznante", tal y como reconoció a People. Sin embargo, su hija quedó asombrada y fascinada por lo que allí vio y escuchó.
India Oxenberg decidió pasar a formar parte de la organización y jurar fidelidad a su líder, Keith Raniere, que en marzo de 2018 fue arrestado y acusado de tráfico sexual y trabajo forzado. Según fuentes judiciales, Raniere obligaba a sus seguidoras a mantener relaciones sexuales con él y las chantajeaba para que no huyesen. Presuntamente también las sometía a violencia física y hambruna. Recientemente se ha conocido que contaba con la colaboración de la actriz Allison Mack ('Smalville'), que supuestamente era la encargada de reclutar a las mujeres.
Involucrada con la causa
Pese a todo, tal y como cita Page Six, " India sigue siendo leal a Raniere y ha prometido ir a prisión para protegerle ". Es más, fuentes cercanas al entorno de la joven afirman que " ella piensa que está contribuyendo a una noble causa " y habría llegado a afirmar: " Seré como Nelson Mandela ".
Toda esta historia tiene preocupada a Catherine Oxenberg, a la que su hija ha dejado de hablar. Es por ello por lo que ha tenido que recurrir a la matriarca del clan : la Princesa Isabel de Yugoslavia. Ella es la única de la familia con la que India Oxenberg sigue manteniendo contacto, por lo que su hija y madre de la protagonista ha decidido viajar con ella a Nueva York para intentar salvar a la joven de las garras de esta siniestra organización. Una historia que quedará plasmada en el libro que la actriz está escribiendo: ' Cautiva, la Cruzada de una madre para salvar a su hija de un culto terrorífico '.