Los Cambridge están de celebración. Si el 23 de abril de 2022 era el Príncipe Luis el que soplaba las velas de la tarta, celebrando su 4 cumpleaños con un posado en la playa, el 2 de mayo de 2022 llegó el momento de festejar el 7 cumpleaños de la Princesa Carlota. Por supuesto también hubo posado oficial, una costumbre muy habitual en la Familia Real Británica y que es casi una obligación cuando se trata de los niños de la dinastía.
Cuando los paparazzi merodeaban para obtener fotos de los hijos de los Duques de Cambridge, el Príncipe Guillermo y Kate Middleton censuraron su actitud y confirmaron que ellos mismos distribuirían periódicamente imágenes familiares, siendo los cumpleaños siempre un momento perfecto para ello. Así, no han fallado y Kensington Palace ha distribuido tres imágenes de Carlota de Cambridge.
Presenta a su perra Orla
Las instantáneas fueron tomadas por la fotógrafa oficiosa de la familia, Kate Middleton, una amante de la fotografía que tiene en sus hijos a sus mejores modelos. Quizás cuando eran más pequeños le resultaba más complicado, pero con la edad que ha cumplido la Princesa Carlota no le ha costado tanto realizar el posado perfecto.
Las imágenes fueron realizadas en Norfolk, donde los Cambridge tienen una casa de campo, Anmer Hall. Allí Kate Middleton escogió un bonito campo de campanillas como escenario de estos retratos en los que se puede comprobar cómo va creciendo la Princesa Carlota, que viste de azul, lleva su melena castaña lisa y suelta y presume de una gran sonrisa en la que le falta algún diente, algo lógico a su edad y que denota que ya ha recibido la visita del Ratoncito Pérez, o en su caso, del Hada de los Dientes.
Pero además de presumir de sonrisa lo hace de su perra. Se trata de Orla, una cocker spaniel que llegó a la familia como regalo de su tío James Middleton, y a la que abraza mientras sonríe en uno de los retratos realizados por su 7 cumpleaños. Orla es una más de la familia desde que el hermano de Kate Middleton se lo entregó poco antes de la muerte de Lupo, la mascota de los Cambridge, y sin duda les ayudó a atenuar el dolor por la pérdida de su amado perro.