El Príncipe Guillermo comentó durante su visita a las jugadoras de la selección inglesa de fútbol femenino que la Princesa Carlota de Cambridge apenas duerme por las noches, y que encima el Príncipe Jorge tampoco está parando quieto, por lo que han sufrido varias madrugadas en vela. Quizás lo que le hacía falta era conocer al pariente más cercano al que todavía no había visto y al que por fin ha conocido tres semanas después de su nacimiento: el Príncipe Harry.
Pese a la ilusión que Enrique de Gales tenía por ver la carita de su sobrina, hasta ahora ha sido imposible por motivos institucionales. El Príncipe tuvo que marcharse antes de que naciera Carlota Isabel Diana para su gira oficial por Australia y Nueva Zelanda, donde permaneció unas dos semanas.
Un encuentro muy esperado
A su vuelta a Reino Unido se esperaba que fuera corriendo a Anmer Hall para visitar a su hermano, su cuñada y su sobrino y para conocer a la Princesa Carlota de Cambridge, que reside en Sandringham desde que tiene cuatro días de vida. Sin embargo, los compromisos oficiales del Príncipe Harry en su país tampoco le dejaron viajar hasta allí.
Y por fin llegó el momento. People informa de que el pasado viernes, el Príncipe Harry cogió el coche y se presentó en casa de su hermano, en Sandringham, para ver por fin en persona la cara del bebé al que solo había visto en fotos, un momento que seguramente no olvidará nunca.