El primer mes de vida de Oscar Carlos Olof: el Príncipe de Suecia que casi nadie esperaba y que no será Rey

Ha pasado un mes desde que la Princesa Victoria de Suecia dio a luz a su segundo hijo. El bebé vino al mundo exactamente a las 20:28 horas del miércoles 2 de marzo en el hospital Karolinska de Estocolmo, pesó 3,655 kilos y midió 52 centímetros. La noticia fue anunciada mediante un comunicado en el que se daban todos los detalles. Además, el Príncipe Daniel confirmó que tanto la madre como el retoño se encontraban perfectamente.

Tan bueno fue el parto, que no fue ambulatorio debido a la hora a la que vino al mundo el bebé, ya que la madre y el hijo pasaron una noche en el centro hospitalario. Al día siguiente, la Princesa Estela fue a conocer a su hermanito, y ya los cuatro miembros de la familia Bernardotte-Westling se marcharon al Palacio de Haga, donde está establecida su residencia, no sin antes hacer pública una imagen en la que los felices padres posan con su hija mayor y con el bebé, al que no se le veía la cara al ir bien protegido en un 'maxi cosi'.

El 3 de marzo, el Rey Carlos XVI presidió una reunión de su gabinete acompañado por el Príncipe Carlos Felipe en el que se decidió que el cuarto de sus nietos se llama Oscar Carlos Olof, tiene tratamiento de Alteza Real y ostenta los títulos de Príncipe de Suecia y Duque de Escania. Ese mismo día tuvo lugar un Te Deum en honor al recién nacido con la presencia de la Familia Real Sueca al completo salvo el propio bebé y la madre, que necesitaba recuperarse del parto.

Los tres nombres tienen un significado especial. Oscar, primera denominación y con la que se le conocerá, viene por el Rey Oscar II, último monarca de los suecos que reinó también sobre Noruega. Es además el nombre del Rey Gustavo VI Adolfo, su tatarabuelo, que se llamaba Oscar de primero. Carlos ha sido un homenaje tanto a su abuelo materno, Carlos XIV Gustavo, como a su tío Carlos Felipe. Además, es un nombre común en la realeza europea. Para finalizar, Olof ha sido un guiño a su padre, cuyo nombre completo es Olof Daniel, aunque se le conoce solo como Príncipe Daniel.

Cuatro días después, cuando el bebé tenía 5 jornadas de existencia, se divulgó la primera imagen del Príncipe Oscar. La fotografía fue tomada el 7 de marzo en el Palacio de Haga y en ella aparece durmiendo plácidamente muy arropado en su cuna. Hubo que esperar casi 3 semanas para volver a ver al segundo hijo de la pareja heredera en un par de imágenes tomadas por el Príncipe Daniel en la que la criatura posa en una con su madre, y en otra con Estela, que ejerce de hermanita mayor a sus 4 años. Quizás su primera aparición pública tenga lugar con motivo del 70 cumpleaños del Rey Carlos XVI Gustavo, que ha preparado una semana de eventos a finales de abril. De no ver al bebé, habría que contar los días para su bautizo, cuya fecha todavía no ha sido anunciada, y que al igual que cuando su hermana fue cristianada el 22 de mayo de 2012, será una ceremonia de Estado al ser un hijo de la Heredera.

Un bebé muy esperado que no reinará

No se puede hablar de milagro con el Príncipe Oscar, si bien es cierto que parecía que la pareja heredera no iba a tener más descendencia después de haber tenido a la Princesa Estela en febrero de 2012. La edad de la Princesa Victoria (cumple 39 en julio), el hecho de la gran distancia que se llevan los hermanos Estela y Oscar, algo poco habitual en la realeza y los problemas de salud del Príncipe Daniel, de quien se dijo que podría haber perdido fertilidad. La causa son sus dolencias renales, que le llevaron a necesitar un transplante de riñón que le dio su padre antes de entrar en la Familia Real Sueca. Los pacientes con problemas en el riñón pueden acabar siendo infértiles, por lo que se pensó que quizás la Princesa Estela sería hija única.

Afortunadamente no fue así, y los Príncipes Victoria y Daniel tuvieron un niño que se ha convertido desde su nacimiento en el nuevo segundón de la realeza, compartiendo posición con la Princesa Carlota de Cambridge, nacida en mayo de 2015, y con su primo Nicolás, segundo hijo de su tía Magdalena. La Princesa Victoria ha seguido la 'tradición' de los Bernardotte de tener una niña y después un varón, pues así le ocurrió a su hermana Magdalena, y también a sus padres, pues ella nació primero y después vino al mundo el Príncipe Carlos Felipe.

Precisamente el alumbramiento de la Princesa Victoria en 1977 provocó que se cambiara la Constitución para equiparar al varón y la mujer en la sucesión al Trono, ya que hasta entonces prevalecía el hombre en la misma línea. El motivo fue que los médicos creyeron que tras haber tenido a Victoria, la Reina Silvia no volvería a concebir. Se equivocaron, y en 1979 vino al mundo el Príncipe Carlos Felipe, que nació siendo Heredero al Trono y desplazando a su hermana.

Para entonces el Parlamento ya h abía aceptado terminar con la discriminación de la mujer, y por tanto en 1980 se terminó para siempre la prevalencia de los varones en la sucesión a la Corona. Pese a que este tipo de regulaciones no suele tener carácter retroactivo, la Cámara aprobó una enmienda para que la Princesa Victoria volviera a ser Heredera y despojase de su condición a quien antes le había quitado a ella lo que le correspondía. El Rey Carlos XVI Gustavo prefería que su hijo fuera el Heredero, pero ya era tarde. De esta forma, en la nueva generación está por encima Estela que su hermano Oscar, que solo accederá al Trono en el caso de que su hermana renuncie a la Corona o muera sin descendencia.