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El Príncipe Andrés, Duque de York y hermano de Carlos III, ha tomado la decisión de revocar y anular su acuerdo por abusos sexuales para poder regresar a la Casa Real Británica. Habría tomado esta decisión después de ver que Virginia Giuffre, víctima y demandante, se hubiese retratado de su acusación por abusos sexuales con otro hombre.
Virginia Giuffre alegó haber sido obligada a mantener relaciones sexuales por el Príncipe Andrés cuando ella era menor de edad, todo esto tras haber sido víctima de trata y pedofilia por Jeffrey Epstein. A pesar de que el Príncipe Andrés nunca reconoció su culpa, se presentó una carta en el tribunal de distrito de Estados Unidos donde iba a celebrarse el juicio, que afirmaba que Virginia Roberts había llegado a un acuerdo extrajudicial con su supuesto agresor.
No obstante, el Duque de York habría decidido llegar a este punto tras las presiones de la Casa Real Británica, ya que su hermano le advirtió que sería expulsado para siempre y que debía llegar a un acuerdo para no empañar el Jubileo de Platino de la Reina Isabel. Sin embargo, el Rey no se ha opuesto a las medidas legales que el Príncipe Andrés ha tomado actualmente para tratar de limpiar su nombre e intentar que Virginia Roberts retire todos los cargos contra su nombre.
Una culpabilidad asumida forzosamente
Al parecer, el hijo de la difunta Reina Isabel II siempre quiso luchar por preservar su inocencia, pero por cuestiones reales se vio obligado a aceptar este acuerdo y no eclipsar el brillante Jubileo de Platino de la Reina. Tras haber tomado la firme determinación de luchar por su verdad, según los expertos, el Príncipe Andrés tendría que presentar lo que se conoce como 'moción para anular la estipulación del acuerdo'. Para que fuera considerada esta opción por el tribunal, su equipo de abogados debería mostrar con pruebas que se ha cumplido fraude, coacción, error o accidente.
Según afirman fuentes cercanas al hermano del Rey, esta situación sumió al miembro de la realeza en una profunda depresión y tristeza, la cual comenzó a transformarse en esperanza cuando Virginia Roberts en noviembre de 2022, afirmó haber incurrido en error al acusar a otro hombre falsamente de abusos. Al parecer, en el acuerdo que ambos firmaron aparecía una clausula que obligaba a los firmantes a mantenerse en silencio por los próximos doce meses. Esta punto del pacto expira en febrero de 2023, por lo que no habrá que esperar mucho para escuchar las versiones de ambos implicados.