Galería: Entronización de Naruhito de Japón
La Casa Imperial Japonesa anunció que el Emperador Naruhito había sido sometido a un examen de próstata, un procedimiento habitual para un varón de su edad. Lamentablemente, los resultados de sangre han mostrado un signo de preocupación que debe ser examinado con más detenimiento.
La agencia de la Casa Imperial calificó los resultados como una " tendencia ligeramente preocupante ", si bien se apresuró a matizar esa preocupación era leve. Esa tendencia calificada como preocupante derivaría de los resultados del análisis del antígeno prostático específico (PSA), cuyo aumento en sangre puede implicar que se sufre cáncer de próstata.
Por ello, Naruhito de Japón debe someterse a más exámenes de cara a descartar o confirmar la existencia de un problema mayor. Se ha indicado por tanto que se realizará una resonancia magnética al Emperador en noviembre de 2022.
La agenda de Naruhito de Japón se ha adecuado a las pruebas médicas, pero nada más. Se ha indicado que el Emperador no sufre dolor y que se encuentra en plenas facultades para ejercer sus funciones como Jefe del Estado, las que realiza desde que comenzó su reinado desde el 1 de mayo de 2019 tras la abdicación de su padre, Akihito.
Su padre superó un cáncer de próstata
Precisamente su padre sufrió problemas de próstata. A Akihito de Japón se le diagnosticó un cáncer de próstata en 2003. Tras una operación y un tratamiento, el que fuera Emperador logró recuperarse totalmente de la enfermedad, manteniéndose además en el trono hasta 16 años más.