El Príncipe Guillermo y Kate Middleton tienen una independencia económica con la que no cuenta la mayor parte del mundo. A pesar de eso y de que sí viven con muchos lujos, disfrutan de cosas tan corrientes como ir a un pub y disfrutar de unas horas de juegos con sus hijos en un entorno público en el que pese a ser quienes son, no son molestados.
El Príncipe Guillermo y Kate Middleton con sus hijos el Príncipe Jorge y el Príncipe Luis en el Chelsea Flower Show 2019Los Duques de Cambridge y sus vástagos suelen pasar por el Old Boot Inn, un pub situado en Bucklebury, donde tiene su casa Michael y Carole Middleton. Como señala The Mirror, llevan tantos años acercándose a este lugar que incluso invitaron al dueño a su boda, celebrada el 29 de abril de 2011 en Londres.
Precisamente esta persona ha contado a The Sun que todos son muy amables y simpáticos, que la Princesa Carlota es adorable y suele jugar en el jardín con la hija de su pareja, que el Príncipe Jorge se viste de camuflaje y tienes que fingir que no les ves y que el Príncipe Guillermo es muy amable.
El Príncipe Jorge y la Princesa Carlota en el jardín de Chelsea Flower Show 2019Los Cambridge gozan de tanta tranquilidad allí que nadie les pide fotos ni les molesta, e incluso una vez hubo un autobús lleno de turistas de Países Bajos que no se dieron cuenta de que estaban junto a cinco miembros de la Familia Real Británica.
¿Contraatacando a los Sussex?
Aunque esta información muestra una imagen cercana y de normalidad de los Cambridge, el lado negativo es que al filtrarse que suelen ir a este sitio, es posible que esa tranquilidad de la gozaban hasta ahora termine. Quizás tampoco les haya gustado que el dueño del pub les haya hasta cierto punto traicionado.
Otra opción es que sea una forma de contraatacar a los Sussex. Teniendo en cuenta que parece que viven una guerra continua, más por los demás que por ellos mismos, o parece casualidad que se filtre que los Cambridge suelen ir a un pub poco después de que la prensa pillara al Príncipe Harry y Meghan Markle con su hijo Archie en un pub cercano a Windsor.
