Días antes de que Kate Middleton comunicara al mundo en un mensaje en vídeo que tiene cáncer, se supo que el Príncipe de Gales iba a tomarse cuatro semanas de descanso para estar con su familia. En su momento se le criticó enormemente, pero al saber que la Princesa de Gales está en tratamiento contra el cáncer, la mayor parte de las opiniones negativas cesaron y se entendió perfectamente que el heredero desapareciera el ojo público durante un mes.
Esas cuatro semanas coinciden con las vacaciones de Pascua de sus hijos, el Príncipe George, la Princesa Charlotte y el Príncipe Louis, y para disfrutar de ellas en familia, los Gales se desplazaron a Anmer Hall, la casa de campo cercana a Sandringham que la Reina Isabel regaló al Príncipe Guillermo y Kate Middleton. Hubo un tiempo en el que fue su hogar permanente, pero tras tener que estar cerca de Londres para asumir más responsabilidades oficiales, quedó como su casa para las vacaciones.
Es para ellos un lugar especial que sin duda ayuda a la Princesa de Gales a sentirse más tranquila y relajada en unos momentos en lo que debe estarlo, así que no pudo haber mejor destino para ellos en sus largas vacaciones de Pascua. De ellas no ha trascendido nada hasta que se filtró un plan familiar, pero no precisamente del matrimonio y sus hijos.
Como señaló Richard Kay en Daily Mail, se vio al Príncipe de Gales en un pub de Norfolk al que acudió el sábado 6 de abril de 2024. No estuvo con Kate Middleton, ni con los amigos que tiene por la zona, sino con su suegra, Carole Middleton. Por tanto, los padres de la Princesa Kate acompañan a los Gales durante todas o parte de las vacaciones de Pascua en Anmer Hall.
La relación entre la Princesa de Gales y sus padres, Michael y Carole, siempre ha sido muy cercana, lo que se extiende también al Príncipe Guillermo, al que los Middleton hacen sentir como uno más. Además, proporcionan mucha ayuda y apoyo a los Gales, lo que viene todavía mejor en estos tiempo tan complicados para ellos.
El miércoles 17 de abril de 2024 se retoman las clases en Lambrook School, y por tanto los Gales deberán estar ya en Adelaide Cottage, su residencia en Windsor. En esas mismas fechas, el Príncipe Guillermo vuelve a la actividad oficial, mientras que
La Corona no se tambalea
Mientras tanto, la Corona británica no se tambalea. El Rey Carlos III, aunque enfermo de cáncer, cumple con sus obligaciones como Jefe de Estado y participa en todos los actos oficiales que puede. En un símbolo de que parece estar bien, acudió a la Misa del Domingo de Pascua en Windsor y realizó junto a la Reina Camilla un 'walkabout', es decir, un paseo estrechando manos a la ciudadanía que se acercó a ver a la Familia Real Británica.
Además, la Reina Camilla, los Duques de Edimburgo, la Princesa Ana y los Duques de Gloucester cargan sobre sus hombros buena parte del peso de la Corona al cumplir con numerosos actos oficiales. Pronto se les une el Príncipe de Gales, que desde la operación abdominal de Kate Middleton ha tenido periodos de gran exposición mediática con otros sin apariciones.