El exjugador de balonmano salió a dar un paseo por Vitoria junto a Claire Liebaert. Posteriormente se les unieron su hermana y una sobrina.
Iñaki Urdangarin no esperaba volver a vivir en Vitoria, sino tan solo ir de visita de vez en cuando para visitar a su familia. Sin embargo, se dio cuenta de que era una buena opción para cumplir el final de su condena. En enero de 2021 se trasladó al Centro de Inserción Social Melchor Rodríguez García de Alcalá de Henares. No estuvo mucho tiempo allí. En febrero de 2021 ya vivía en Vitoria, donde encontró un trabajo en el bufete Imaz&Asociados.
Se instaló en casa de su madre, donde podía dormir los fines de semana y pasar el tiempo libre que tenía entre el trabajo y la prisión de Zaballa. Desde junio de 2021 se le permitió no tener que volver a dormir en la cárcel y poder salir de España, lo que le dejó disfrutar del verano familiar en Bidart por primera vez desde que ingresó en prisión.Mientras avanza su condena y espera volver a instalarse en Ginebra, permanece relativamente feliz en Vitoria, donde tiene mucho apoyo familiar, sobre todo el de su madre, Claire Liebaert, encantada con tenerle en casa. Eso no quita para que eche de menos a la Infanta Cristina y sus hijos, a los que no ve todo lo que le gustaría.
Muy unido a su familia
El 4 de octubre de 2021 tuvo lugar su 24 aniversario de matrimonio. Se esperaba que unos días más tarde, ya el fin de semana, la Infanta Cristina viajara a Euskadi para festejarlo con su marido. No fue así, pero a cambio se pudo ver al exjugador de balonmano disfrutando de un plan también familiar.
Iñaki Urdangarin salió a pasear con su madre, Claire Liebaert. Lo hicieron por Vitoria, donde residen, y tan cómplices como de costumbre. La belga iba agarrada del brazo de su hijo, con el que se desplazó hasta el lugar en el que les esperaban otros miembros de la familia. Se trataba de Lucia Urdangarin, que saludó con mucho cariño a su madre y su hermano y se unió al paseo familiar, en el que también estuvo una sobrina.