La salida de Reino Unido de la Unión Europea el 29 de junio sin un consenso con Bruselas podría desatar el caos para la Familia Real, ya que el Parlamento rechazó la propuesta acordada entre el Gobierno Británico y la UE. En ese sentido, The Sunday Times y Mail on Sunday han informado de un posible plan de evacuación de la Reina, el Duque de Edimburgo y parte de la Familia Real Británica para ser trasladados fuera de la capital si hay disturbios, aunque por motivos de seguridad no han revelado la localización exacta en la que serían refugiados.
Se trata de una versión rediseñada de una operación secreta creada durante la Guerra Fría para mantener a salvo a la Familia Real en caso de que la Unión Soviética llevase a cabo un ataque nuclear. Sin embargo, Jacob Rees-Mogg, diputado conservador y Brexiteer, lo califica de una exageración, ya que si los Windsor permanecieron en Londres durante los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial, no tendrían por qué marcharse en caso de caos por el Brexit.
La Reina Isabel pide acuerdos
A pesar de la insistencia de la Monarca a los dirigentes políticos para la llegada a un acuerdo ante la iniciativa de Theresa May, la incertidumbre se apodera del Parlamento y de la Casa Real. Esto supone que el departamento gubernamental encargado de la planificación de emergencias considere a los disturbios como un caso extremo, pero cada vez más probable.
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Ante la posible inminente salida del país anglosajón de la Unión Europea, el exagente de policía que se encargaba de la protección de la Familia Real, Di Davies, ha advertido de que "si se produjesen problemas en Londres claramente tendrían que llevarse a la Familia Real lejos de los focos de conflicto". El tiempo dirá si esta medida es necesaria o no.