Una transición que se aprecia perfectamente en las apariciones públicas que han hecho desde su vuelta a Londres tras finalizar su viaje a África. En la primera de ellas se notó cómo Meghan Markle sacaba fuerzas para sonreír. Luego llegó una aparición sorpresa en la que la Duquesa ya se mostraba más sonriente de forma natural, pero el Príncipe Harry estaba sumamente serio. Una seriedad que sigue ahí, muy visible y presente, pero que ya se va combinando con sinceras sonrisas gracias a las anécdotas que le han pasado en sus últimos actos.
Después de su divertida reacción cuando le tocaron el culo en un acto oficial, ahora ha tenido otra contestación muy natural y graciosa durante su visita a Japón, hasta donde ha viajado en solitario para presenciar desde la grada la final del Mundial de Rugby entre Sudáfrica e Inglaterra. Un viaje en el que también ha aprovechado para tener un encuentro con atletas que se están preparando para Juegos Paralímpicos de Tokio y una charla con un grupo de estudiantes.
Una estudiante sonroja al Príncipe Harry
Ha sido durante esta última cita cuando ha llegado la anécdota. Mientras se hacía una foto con el grupo de estudiantes, una joven no podía dejar de mirarle y no se resistió a decirle que le consideraba un Príncipe muy guapo mientras con su mano se tocaba el dedo en el que el Duque lleva su anillo de casado. Él, entre risas y algo sonrojado, le corroboró que, efectivamente, "soy un hombre casado".