La Reina Letizia se toma en serio todo lo que hace. Su labor no se resume en acudir a los actos oficiales, sino que se esfuerza en que todo salga perfecto y en preparar todo de forma adecuada para estar a la altura. Además de conseguir su propósito en ese sentido, logra cautivar con sus estilismos. Sin embargo, le falla la parte más humana, ya que suele encontrarse demasiado tensa en algunos momentos y pierde naturalidad, algo necesario para un miembro de una Familia Real.
De todos modos, no siempre es así, y en ocasiones muestra su naturalidad y una simpatía que dista mucho de ser impostada. Sucedió el jueves 22 de noviembre de 2018. Ese día, Doña Letizia se desplazó a la Ciudad BBVA en Madrid para presidir el acto de entrega de la X edición de los 'Premios Integra de BBVA'. Allí, se pudo comprobar que la Reina lució una melena más oscura y un conjunto formado por unos pantalones estilo Príncipe de Gales, blusa blanca y una levita negra.
La naturalidad de la Reina Letizia
Eso fue lo que vio la gente a través de los medios de comunicación, pero quien estuvo presente pudo comprobar no solo la simpatía de la Reina, sino también su arranque de espontaneidad y naturalidad que sorprendió a los presentes.
Una vez finalizado el acto, se sirvió un cóctel para los invitados al que Doña Letizia se quedó. Este suele ser un momento relajado en el que la Familia Real charla animadamente con los presentes, aunque depende de quién esté y del tiempo que se tenga.
En este caso, la Reina charló no solo a las autoridades, sino también a otros invitados, a los que fue saludando con mucha amabilidad. Como ha podido saber Bekia, lo curioso es que tras hablar con un grupo de personas y antes de marcharse se dio la vuelta y les ofreció hacerse una foto con ella si lo deseaban. Los invitados se quedaron asombrados ante la naturalidad de Doña Letizia, que no es que sea precisamente amiga de fotografiarse con todo el mundo, y ante la invitación de la Reina, aceptaron la propuesta y posaron con ella para inmortalizar ese momento con sus teléfonos móviles. Cuando quiere, Doña Letizia saca ese punto relajado y natural que tantos puntos le da.