Entre los que se han sentido si no horrorizados, sí al menos dolidos, son el Príncipe Guillermo y Kate Middleton. Los anteriormente conocidos como Duques de Cambridge formaron equipo personal y profesional con el Duque de Sussex. Sin embargo, esa buena relación no acabó bien, y aunque se han cuidado mucho de mostrar ataques directos, sobre todo el Príncipe Harry, que es el que ha hablado abiertamente de su relación desde que las cosas ya no iban bien como antes, está claro que algunos momentos y comentarios de la docuserie han hecho más daño a los Príncipes de Gales.
"Esto va sobre deber y servicio y al ser parte de esta familia es mi deber destapar la explotación y los sobornos que llevan a cabo los medios", manifestó el Príncipe Harry. "Al tolerar esto nos están destruyendo", señaló Meghan Markle en reproche a la Casa Real Británica. "No se trata solo de nuestra historia, es algo más grande. Nadie sabe toda la verdad, nosotros sabemos toda la verdad. La Institución sabe toda la verdad y los medios también porque están involucrados, y creo que cualquiera en mi situación hubiera hecho exactamente lo mismo", manifestó el Príncipe Harry.
Reproches y más reproches
Además de esta introducción, los reproches no tardaron en llegar. Fue al recordar lo que pasó cuando se supo públicamente que el Príncipe Harry salía con Meghan Markle. Era octubre de 2016: "Desde Palacio se ordenó no decir nada. Pero lo que la gente necesita entender es que la mayoría de la familia había pasado antes todo por lo que ella estaba pasando. Era casi como un rito de iniciación. Algunos miembros de la familia decían: 'Mi mujer también tuvo que pasar por eso. ¿Por qué iba a ser diferente con tu novia? ¿Por qué debería recibir trato especial? ¿Por qué hay que protegerla?' Les dije, la diferencia aquí es el aspecto racial", relató el Duque de Sussex.
No ha querido aclarar a quién se refería, pero tanto Lady Di, como Camilla, Sarah Ferguson o Kate Middleton sufrieron ese 'rito de iniciación' a modo de acoso por parte de la prensa británica. Algunas de ellas lo siguieron sufriendo toda la vida, como la Princesa Diana, mientras que para las otras, las aguas se fueron calmando. ¿Fue el Príncipe Guillermo quien le dijo eso? Harry no lo aclara, pero sin duda la Princesa de Gales recordará lo mal que se lo hizo pasar determinada prensa, y eso que en aquel momento no había redes o no tenían tanto poder. Meghan Markle sufrió ataques tanto en medios como en redes sociales.
Pero hay más: "Creo que para muchos miembros de la Casa Real, sobre todo los hombres, puede haber la tentación o el impulso de casarse con alguien que encaje en el molde en vez de alguien con quien quizás estés destinado a estar. Es la diferencia entre tomar decisiones con la cabeza o con del corazón. Mi madre tomó la mayoría de sus decisiones, si no todas, desde el corazón, y yo soy hijo de mi madre". Estas palabras también van dirigidas a los varones de la Familia Real Británica. ¿Acaso piensa que Kate era la que encajaba pero no era el verdadero amor de su hermano? Está claro que encajar, encaja, siempre ha sido un miembro perfecto de la Familia Real Británica, pero además, los años que llevan juntos ponen en evidencia que el Príncipe Guillermo y Kate Middleton también eligieron con el corazón.
Se vuelve a ver la entrevista de Lady Di
Pero si a los Príncipes de Gales no les dolió por un lado, al heredero le puede doler por otro. "Mi madre tomó la mayoría de sus decisiones, si no todas, desde el corazón, y yo soy hijo de mi madre". Es como si una vez más el Duque de Sussex capitalizara el legado de Lady Di, la reina de corazones y una de las mujeres más queridas e influyentes del siglo XX. No es la única mención a Lady Di que puede molestar a su hijo mayor: "Gran parte de lo que Meghan es y cómo es se parece mucho a mi madre. Tiene la misma compasión, tiene la misma empatía, la misma seguridad, tiene esa ternura. Sé que habrá gente por todo el mundo que básicamente no esté de acuerdo con lo que he hecho y cómo lo he hecho, pero yo sabía que tenía que hacer todo lo posible para proteger a mi familia. Sobre todo después de lo que le pasó a mi madre. No quería que la historia se repitiera".
Y si esa comparación entre Diana y Meghan quizás no le siente bien, menos lo hará que la docuserie muestra partes de la entrevista que Lady Di concedió en noviembre de 1995, aquel bombazo informativo que fue fruto de engaños por parte del periodista a la que se la dio, Martin Bashir. Tras una investigación, quedó acreditado que la Princesa Diana solo accedió tras haber sido engañada y manipulada. BBC se disculpó públicamente y destinó 1,6 millones a modo de indemnización que se repartieron entre 6 fundaciones con las que colaboraba la Princesa de Gales más el Diana Award. El Príncipe Guillermo pidió que la entrevista no volviera a ser emitida, ni íntegramente, ni por partes, pero la docuserie de Netflix sí ha incluido fragmentos: "Ya tenía experiencia acumulada por cómo estaba luchando viviendo esa vida. Se vio forzada a hablar de ello y dio una entrevista en Panorama. Ahora sabemos que la engañaron para dar esa entrevista, pero al mismo tiempo, contó la verdad de su experiencia", comentó el Duque de Sussex para justificar los extractos incluidos en 'Enrique y Meghan'.
"¿Cómo se siente acerca de la forma en que la prensa se comporta con usted?", preguntó Martin Bashir, ante lo que la Princesa Diana respondió: "A día de hoy sigo encontrando el interés abrumador y excesivo porque no me gusta ser el centro de atención. En mis funciones públicas entiendo que me fotografíen cuando salgo del coche. Pero en realidad me fotografían desde que salgo por la puerta de mi casa. Nunca sé dónde va a haber una cámara."
Otro momento poco agradable para los Príncipes de Gales es la parte de la entrevista de compromiso de Harry y Meghan que se ve: "Su familia me ha acogido muy bien", dijo Meghan. "Catherine ha sido increíble, al igual que Guillermo", comentó el Príncipe Harry, ante lo que ella añadió que Kate Middleton era maravillosa. Hasta ahí todo bien, pero previamente la Duquesa de Sussex calificó esa entrevista como "telerrealidad orquestada", algo ensayado. "A lo que voy es que no nos permitieron contar nuestra historia porque ellos no querían", comentó Meghan, ante lo que Harry aportó: "Nunca hemos podido". ¿Acabo eran falsos cumplidos?
Guillermo y Kate, poco cariñosos
Lo que también contó Meghan fue que no parece que los Gales sean muy cariñosos, o al menos no con ella: "Ahora sé mucho, pero me alegro de que no fuera así entonces porque así pudo ser mi yo más auténtica, sin tanta preparación. Hasta cuando vinieron Guillermo y Kate y les conocí. Vinieron a cenar. Recuerdo que llevaba unos vaqueros rotos e iba descalza. Me gusta dar abrazos, siempre me ha gustado. Y no me di cuenta de que a muchos británicos eso les choca. Supongo que rápidamente entendí que la formalidad del exterior continúa en el interior. Que de cara al público eres de una forma y luego cierras la puerta y es en plan: 'Ah genial, Ya podemos relajarnos'. Pero esa formalidad se traslada a ambos lados. Y eso me sorprendió", comentó Meghan mientras aparecían imágenes del Príncipe Guillermo y Kate Middleton. Blanco y en botella.
Otros momentos que pueden no haberles gustado son con cuestiones también familiares: "Recuerdo que cuando mi familia la conoció se quedaron muy impresionados. Algunos de ellos no sabían qué hacer. Diría que estaban sorprendidos de que el pelirrojo estuviera con una mujer tan guapa e inteligente. Pero el hecho de que saliera con una actriz estadounidense fue probablemente lo que más nubló su juicio al principio. 'Una actriz estadounidense. No durará'", declaró el Duque de Sussex. "Que lo de ser actriz fuera el mayor problema resulta gracioso. Desde el punto de vista de los británicos era algo tremendo. Hollywood... fue muy fácil para ellos encasillarme", comentó ella.
Se recordó además aquel desafortunado broche que llevó la Princesa Michael de Kent en diciembre de 2017 al almuerzo prenavideño que la Reina ofrecía a su familia en Buckingham Palace. Era la primera vez que iba Meghan Markle. "A veces esta familia es parte del problema y parte de la solución. Y hay un nivel enorme de sesgos inconscientes. Los sesgos inconscientes no son culpa de nadie, pero una vez te lo dicen o lo identificas en ti debes rectificar. Es educación, es conocimiento de causa y es un trabajo en progreso constante para todos, incluido yo". Quizás aquí el Príncipe Guillermo se sienta reflejado y él mismo haya identificado ese sesgo inconsciente y realice un trabajo constante.
Poco tacto al recordar su encuentro con Isabel II
Lo que seguro que les molestó fue cómo expresó Meghan que había sido su primer encuentro con la Reina Isabel: "Es algo surrealista. No hubo ese gran momento de 'Ahora vas a conocer a mi abuela'. No sabía que la iba a conocer hasta momentos antes. Estábamos en el coche e íbamos a Royal Lodge a comer y dijo: Mi abuela vendrá después de misa. Estábamos en el coche y él dijo: "Sabes hacer una reverencia, ¿verdad? Pensé que era una broma". Los estadounidenses me entenderán. Tenemos un torneo y cena medievales. Fue algo así, una reverencia como si fuera... Un placer conocerla, Su Majestad". El problema es que la reverencia resultó exagerada, se estaba riendo y con cierto tono burlón, algo que puede no importar a los demás, pero sí molestar a los hijos y nietos de Isabel II, sobre todo teniendo en cuenta que falleció solo tres meses antes del estreno de la docuserie.
En la docuserie se recuerda el vínculo de la Familia Real Británica con la esclavitud, recordando que el primer viaje comercial de esclavos que realizó Gran Bretaña fue financiado personalmente por Isabel I de Inglaterra, la última Tudor. Y que otros Monarcas siguientes hicieron lo mismo hasta que se abolió la esclavitud en 1807, en tiempos de Jorge III. Se hace referencia a que el imperio esclavista británico fue abolido en 1830, pero que se compensó a los amos de esos esclavos. Esto puede doler, pero es una realidad por la que el propio Príncipe Guillermo pidió perdón en su gira caribeña por el Jubileo de Platino. La Casa Real Británica podría ir mucho más allá en la lucha contra el racismo y debería hacerlo, algo que sin duda los Duques de Sussex, ya fuera de ella, sí tienen como un punto clave.
Crítica a uno de los legados de la Reina Isabel II
Sin embargo, lo que resulta llamativo es la crítica a la Commonwealth que se realiza en la docuserie. No son Harry y Meghan los que hablan, sino la escritora británica Afua Hirsch y el escritor y activista Kehinde Andrews, aunque parece evidente que si están ahí y dicen eso, ha sido con el consentimiento de los Sussex. Hirsch y Andrews critican la Mancomunidad de Naciones surgida tras el final del Imperio Británico. De hecho, ella lo califica como Imperio 2.0, mientras que él señala que nada ha cambiado y que las condiciones de las personas negras de países de la Commonwealth siguen siendo igual de malas que hace un siglo.
Esto puede molestar a los Gales, y la Casa Real Británica en general, ya no solo por la crítica a la Commonwealth en sí, que también, sino porque también es una crítica a la Reina Isabel II, que durante todo su reinado tuvo como uno de sus pilares la lucha por mantener la Commonwealth, con la que se volcó durante décadas. Es uno de los legados, algo de lo que en su momento Harry y Meghan parecían sentirse orgullosos. Tanto es así que los Sussex fueron Presidente él y Vicepresidenta ella de la Queen's Commonwealth Trust. Quizás con la distancia que les aporta estar lejos de la Casa Real Británica han cambiado de parecer.