Una vez finalizada la temporada con el Barça B de balonmano, Pablo Urdangarin ha podido relajarse un poco después de unos meses muy intensos. Su carrera como deportista ha despegado del todo durante la temporada 2021/2022 y ya no hay quien pare al segundo hijo de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, que además de consolidarse en el filial, ha subido en numerosas ocasiones al primer equipo.
El jugador de balonmano, que ha asegurado que no se pone límites y que cree que puede llegar bastante lejos, reside en La Masía, lo que muestra su potencial, y combina su carrera deportiva con estudios en la EU Business School de Barcelona. Está claro que está muy ocupado, por lo que una vez ha podido estar un poco más libre ha aprovechado para disfrutar de la playa.
El deportista se desplazó con sus amigos a Castelldefels, localidad costera cercana a Barcelona en la que disfrutó de un día de playa. Como señala Lecturas, Pablo Urdangarin, que llevaba un bañador azul a rayas, se metió en el mar, jugó al balón con sus amigos y se lo pasó en grande en esta jornada de sol y playa.
No logró pasar desapercibido durante su paso por la playa, algo lógico teniendo en cuenta que aunque antes ya era conocido al ser hijo de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, su fama creció enormemente por su carrera como jugador de balonmano y por el seguimiento mediático al que tuvo que hacer frente cuando se separaron sus padres.
Quiere ser parte de la selección española
Pablo Urdangarin espera seguir creciendo en el Barça de balonmano y llegar tan alto como lo hizo su padre, que no solo fue una leyenda en el club blaugrana, sino que fue a los Juegos Olímpicos con la selección española y fue medallista olímpico. Para Pablo Urdangarin, ser parte de la selección nacional es un sueño que quiere cumplir y que no parece imposible teniendo en cuenta su buen rendimiento.