Pablo Urdangarin nació el 6 de diciembre de 2000, a pocos días del comienzo del siglo XXI y en una fecha muy especial para España, ya que se cumplían 22 años desde la celebración del referéndum de 1978 en el que el pueblo español votó a favor de la Constitución Española. Desde entonces, la Familia Real y la Familia del Rey celebran ambas efemérides.
El segundo de los cuatro hijos de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin tiene tratamiento de Excelentísimo Señor y dignidad de Grande de España, es nieto y sobrino de Reyes, y hasta que Felipe VI subió al Trono, perteneció a la Familia Real Española. Lamentablemente, su privilegiada existencia se vio alterada por el Caso Nóos, y desde entonces ha ido creciendo intentando pasar desapercibido en la medida de lo posible.
Pablo Nicolás Sebastián Urdangarin de Borbón nació en Barcelona, ciudad en la que vivió hasta 2009. Ese año se marchó junto a sus padres y hermanos a Washington debido a un traslado de Iñaki Urdangarin, que aceptó un puesto en Telefónica en Estados Unidos. Lo cierto es que interesaba que el exjugador de balonmano estuviera lejos de España. En Washington pasaron dos años tranquilos hasta que en otoño de 2011 estalló el Caso Nóos y la vida de los Urdangarin de Borbón se convirtió en un infierno.
Al año siguiente regresaron a Barcelona por deseo de la Infanta Cristina, pero al comprobar que su existencia era peor en territorio nacional, en 2013 se trasladaron a Ginebra, donde la hija de Juan Carlos I obtuvo un empleo en The Aga Khan Trust for Culture que simultanea con su trabajo en la Fundación LaCaixa.
Adiós a Ginebra, hola a Hannover
Allí han transcurrido los últimos años como menor de edad de Pablo Urdangarin, que al igual que sus hermanos, completó sus estudios secundarios en L'Ecolint de Ginebra. Su regreso a España le llevaba a Vitoria para ver a los Urdangarin, a Mallorca, donde veranea con los Borbones y al País Vasco Francés, lugar en el que pasan su descanso estival los familiares de su padre. El tiempo pasó y llegó su graduación, marcada por la ausencia de la Reina Sofía y sobre todo de Iñaki Urdangarin, que ingresó en prisión el 18 de junio de 2018 para cumplir la condena de 5 años y 10 meses que le confirmó el Supremo. Tras acabar el colegio dejó Ginebra para empezar una nueva vida, ¿dónde? en la vecina Alemania. Empezaba así a trazar su propio camino.
El sobrino del Rey Felipe fichó por el equipo juvenil del TSV Hannover Burgdorf, conjunto de balonmano al que llegó como refuerzo para la temporada 2018/2019. Allí le han apadrinado Antonio Carlos Ortega, entrenador del primer equipo, e Iker Romero, que se encarga de entrenar a los juveniles, y por tanto a Pablo Urdangarin. Los dos son amigos de Iñaki Urdangarin de su etapa como jugadores de balonmano, pero a pesar de ello, si está allí es porque tiene madera. De hecho, Romero ha destacado de él que aunque no tiene la forma física de Iñaki Urdangarin, está trabajando duro para mejorar y poco a poco se van notando los resultados.
Simpático y tranquilo
¿Cómo es Pablo Urdangarin? En contraposición a su timido hermano Juan, él es extrovertido, aunque no tanto como su otro hermano Miguel, que es el más bromista. Pablo Urdangarin es reservado cuando tiene que serlo, es simpático sin estridencias y sobre todo muy cariñoso y familiar. Más allá de lo que se puede decir de él, las imágenes que se le han tomado a lo largo de su vida le muestran siempre atento con sus hermanos, principalmente con los menores, y muy cariñoso con sus padres. Para la Reina Sofía también tiene siempre un abrazo o un beso, algo que le llena de felicidad.
Es un hombre disciplinado, tranquilo y sobre todo muy deportista. Era de esperar que siendo hijo de la Infanta Cristina, que compitió en el equipo olímpico de vela de España y de Iñaki Urdangarin, exjugador del Barça y con dos medallas olímpicas, tuviera interés por el deporte. Más allá de su pasión por la vela y por el esquí, le gustan el baloncesto y el balonmano, siendo este último el deporte que ha elegido como carrera profesional.
Fan de Netflix y el alma del equipo
Gracias a su fichaje se ha sabido que juega como extremo derecho y que es zurdo, como Iñaki Urdangarin. En esto coincide con la Princesa Leonor, que también es zurda. Pablo Urdangarin mide 1,86 y pesa 70 kilos, y antes de acabar en Hannover militó en el club handbol Esplugues, el SG Léman Genève y el CS Chênois Genève Handball. Le gusta montar en bici, tanto que la prefiere al coche, como su tía abuela Irene de Grecia toca el piano, y sus planes favoritos son ver Netflix y pasar tiempo con su familia.
Su mayor handicap es el alemán, ya que aunque habla español, catalán, francés e inglés, no sabía demasiado sobre la lengua de Goethe pese a que la Reina Sofía lo habla. Poco a poco lo está aprendiendo, y mientras tanto se comunica con sus compañeros de equipo en inglés. Su sueño por cumplir es convertirse en jugador de la selección española de balonmano, como hizo su padre. De momento le queda mucho recorrido, pero al menos es, en palabras de su compañero Niklas Peinz, el alma del equipo.