Continúan las dimisiones en el Palacio de Kensington. Si hace unos meses se despidieron la secretaria privada y la asistente personal de Meghan Markle, ahora, poco después de empezar el nuevo año, la Duquesa de Sussex debe decir adiós a una persona de vital importancia para su seguridad.
Por razones de seguridad no se ha revelado su identidad, pero The Daily Mail desvela que " su guardaespaldas armada de Scotland Yard ha anunciado que renunciará a su puesto ". Una noticia que confirma la propia institución, aunque añade: " Ha tomado la decisión por razones personales y no tiene absolutamente nada que ver con los Duques de Sussex, quienes están enormemente disgustados por su marcha".
Esta aclaración se ha hecho necesaria debido a los rumores que comenzaban a circular sobre una supuesta mala relación entre Meghan Markle y la mujer que ha velado por su seguridad e integridad física durante los últimos meses y muy especialmente durante su gira oficial por Oceanía.
Un trabajo muy complicado
Según sostiene el citado medio, en la decisión de la guardaespaldas ha influido notablemente la dificultad que tiene el equipo de seguridad para proteger a la Duquesa de Sussex debido a su " excesivo afán por parecer una más " y mostrarse cercana con el pueblo: " En su rol actual no puede ir a ninguna parte sin su equipo de protección y eso es una fuerza de restricción muy fuerte para una persona como ella ".