Un cerdo vietnamita no es una mascota cualquiera y es que hace poco el Gobierno lo declaró una especie invasora, lo que hizo que el pasado mes de marzo se prohibiese la posesión y el comercio de esta especie. Sin embargo, esto no es excusa para dejar al animal, ya que según la normativa transportar y poseer estos animales estará prohibido a partir de 2022, lo que le dejaba varios años a la nieta del Rey para registrarlo y quedárselo con ella sin problemas.
Los cuidados de la mascota
Pero eso sí, es cierto que mantener a esta mascota no es una tarea fácil, y a Victoria Federica le habría costado algún que otro dolor de cabeza ya que las condiciones en las que hay que tener la casa para este animalito no son pocas: hay que esterilizarlo, marcarlo, declarar que no sea liberado del medio natural y en caso de que se escape comunicarlo cuanto antes a las autoridades, entre muchas otras condiciones.
Está claro que la nieta del Rey Juan Carlos con la ajetreada vida social que lleva no podría hacerse cargo de cuidar a esta mascota y es que este año comenzará la universidad lo que le quitará aún más tiempo para hacerse cargo de esta gran responsabilidad, por lo que Victoria Federica decidió donarlo a una granja escuela para que lo cuidasen como merece dándole todo el cariño que necesita según ha explicado para Vanity Fair.