Su defunción se produce tan solo 5 días después de que tuviera lugar el funeral de su hermana, María Teresa, en Parma, quien falleció en marzo de 2020 por el coronavirus. Ambas eran primas del Rey Felipe VI, y para Cecilia de Borbón, que residía ahora en París, ese velatorio ha acabado siendo la última vez que se ha dejado ver en público.
Ha sido su sobrino, Carlos Javier de Borbón, quien ha emitido un comunicado para dar a conocer la triste noticia: "Amigos, lamento profundamente tener que informar del fallecimiento esta misma tarde en París de mi querida tía doña Cecilia. Incansable luchadora, siempre dispuesta a ayudar a los otros con una sonrisa que le hacía especial, activa militante carlista junto a mi padre Carlos Hugo y mis tías María Teresa y María de las Nieves en las tareas políticas encomendadas en los difíciles años 60 y 70 del siglo pasado".
También ha querido incidir en la importancia que tuvo su tía a la hora de ayudar a los demás, dando igual a donde tuviera que desplazarse: "De una vitalidad desbordante, trabajaba de enfermera en una leprosería, o se ofrecía voluntaria en las inundaciones del Vallés, o trabajaba para la FAO a favor de Laos". Incluso, gracias al Duque de Parma, se sabe que sus últimos años de su vida los dedicó a colaborar con la Asociación de Cuidados Paliativos de París.
Pertenecía a la rama Carlista
Cecilia de Borbón por su parte es la hija de Francisco Javier de Borbón y Braganza, Príncipe de Parma y de Plasencia, que durante muchos años pidió que el trono de España le fuera entregado. Tras su muerte, fue el hermano de Cecilia de Borbón quien se convirtió en la cabeza de la dinastía Carlista, Carlos Hugo de Borbón y Parma, histórico dirigente que murió en Barcelona en el 2010. A día de hoy, ese honor ha recaído en Carlos Javier de Borbón, sobrino de la aristócrata.