El Duque de Cambridge y el Duque de Sussex se muestran como un frente unido con un tema pese a la enorme distancia que existe entre ellos.
Que hay problemas entre el Príncipe Guillermo y el Príncipe Harry, es evidente. Los dos pasaron de ser unos hermanos profundamente unidos que durante años se apoyaron el uno al otro para intentar superar la trágica muerte de Lady Di a prácticamente no hablarse. Por si quedaban dudas, el Duque de Sussex confesó en otoño de 2019 en el documental 'Harry & Meghan: An African Journey' su distanciamiento con el Duque de Cambridge, aunque también dijo que le quería y le querría siempre.
El tiempo ha pasado, pero no ha cambiado ni una cosa ni la otra a pesar de que hayan intentado acercar posturas. 2021 parecía el año de la reconciliación, pero la entrevista que el Príncipe Harry y Meghan Markle concedieron a Oprah Winfrey les ha alejado todavía más. En ella, el Duque de Sussex realizó una alusión directa a su hermano, al que dijo querer profundamente, pero del que también señaló: "Es mi hermano, hemos pasado por un infierno juntos, tenemos una experiencia compartida. Pero estamos en caminos diferentes. La relación es distante en este momento. Pero el tiempo todo lo cura. Ojalá". También lamentó que tanto su padre como su hermano están atrapados por la Monarquía, pero que no pueden salir y que por tanto siente compasión hacia ellos.Todo esto entre acusaciones de racismo que han hecho mucho daño a la Familia Real Británica al señalar directamente a un miembro de la dinastía no identificado, pero que no son ni la Reina Isabel ni el Duque de Edimburgo, y que el Príncipe Guillermo contestó de forma inesperada cuando fue preguntado en una visita a School21 en Stratford, en el este de Londres, al que acudió junto a Kate Middleton. Cuando fue preguntado por si había hablado con su hermano tras la emisión de la entrevista, respondió que no: "No, todavía no he hablado con él, pero lo haré". Inmediatamente después, el periodista Inzamam Rashid de Sky News le preguntó por si la Familia Real Británica era racista: "No somos una familia racista", respondió el Duque de Cambridge.
Está claro que es mucho el dolor que existe entre ellos, o al menos que el distanciamiento es enorme, tanto geográfico como afectivo, pero hay un motivo para la esperanza porque es precisamente un motivo y un acontecimiento el que va a reunir a sus hermanos, que de acuerdo con The Mirror siguen dispuestos a mostrar un frente unido en este asunto. A los hermanos les unen o les unían muchas cosas, pero nada tan fuerte como Lady Di. El dolor compartido, el recuerdo de su madre y el mantenimiento de su legado son más fuertes que el Sussexit, los desacuerdos y los choques fraternos. Por ello, están dispuestos a dejar las diferencias a un lado. Juntos por Lady Di
El 1 de julio de 2021 estarán los dos juntos para inaugurar la estatua de Lady Di, obra de Ian Rank-Broadley que se alzará en el White Garden de Kensington Palace. La fecha no está elegida al azar. Ese día, la Princesa Diana hubiera cumplido 60 años, y allí deben estar sus dos hijos para honrar el recuerdo y el legado de su madre. Ambos están listo para estar hombro con hombro, para remar en la misma dirección y para poner en valor antes lo que les une por delante de lo que les separa.
Los únicos problemas serían que la pandemia no permitiese el viaje del Príncipe Harry a Reino Unido, si bien está invitado también al centenario del Duque de Edimburgo y a Trooping the Colour, que se celebran el 10 y el 12 de junio respectivamente, así como el parto de Meghan Markle. Los Duques de Sussex confirmaron que esperan una niña que vendrá al mundo en verano de 2021, lo que implica que es probable que Meghan Markle no regrese a Reino Unido en aquella época y que quizás el Príncipe Harry pudiera ausentarse si en esos días naciera su segunda hija.