El juez Castro ha tardado una semana en responder con un auto al recurso de apelación presentado por la defensa de la Infanta Cristina tras la decisión del magistrado de enviar a la hermana del Rey de España al banquillo de los acusados por delito fiscal.
"La resolución era previsible, y lo es tanto en su contenido como en su forma. Con el recurso quería constatar que el juez instructor sostiene a pesar de que no hay acusación del fiscal ni de la Abogacía del Estado, que no es de aplicación la Doctrina Botín, que ha sido aplicada de forma unánime. Hemos dejado claro que para el juez es relevante la posición de Manos Limpias en contra de lo que opine el Tribunal Superior", ha señalado Roca.
Ley igual para todos
"Esta situación es insólita; aquella que define que en la historia procesal reciente de España es el primer caso en España que habrá alguien a quien se acusa de un presunto delito fiscal en contra de la opinión del criterio fiscal y la Abogacía del Estado. Aquello de que la ley debe ser igual para todos, en este caso es un objetivo fundamental. Queremos que la Ley sea igual para todos".
"No vamos a formular recursos de queja, no queremos ningun trámite dilatorio. Esperamos que en otro escenario judicial se aplique la Ley y le sea aplicada a la Infanta. En el proceso de cuestiones previas queremos que se aplique la Doctrina Botín, que es unánime". Asimismo, Roca ha dejado una frase en relación a la inocencia de su cliente: "La Infanta Cristina proclama su inocencia, no tiene nada de lo que arrepentirse. Los inocentes no tienen que arrepentirse".
En cuanto al rifirrafe con el juez Castro, que ha criticado a la defensa de la Duquesa de Palma, ha dejado patente que no quiere entrar en ningún cruce de acusaciones: "No vamos a convertir un tema serio en un debate personal entre abogados y jueces. No vamos a entrar en esto. No voy a poner ninguna traba a la libertad de expresión de nadie".