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Aunque muchas veces se ha dicho que un Rey no puede tener amigos, tanto Don Juan Carlos como Don Felipe los tienen, sobre todo el Emérito, que puede presumir de tener una corte a lo largo y ancho del mundo que le ha venido muy bien para sobrellevar los momentos más delicados que le ha tocado vivir en el ocaso de su vida.
Felipe VI es un hombre más reflexivo e introvertido que su padre, y también más responsable. Tiene un puñado de buenos amigos, sobre todo Álvaro Fuster y Pedro López-Quesada, que también es su primo. Quien no es su amigo, o al menos no tanto como ha querido hacer creer Pedro Sánchez, es precisamente el Presidente del Gobierno de España.
El jefe del Gobierno aireó una gran amistad en su libro 'Manual de resistencia'. En el texto, recuerda que su relación se fraguó entre 2015 y 2016. Tras el rechazo de Rajoy a formar Ejecutivo y después de que el Rey se lo encargara a Sánchez, viendo que había una situación de bloqueo, el líder socialista narró lo que pasó entre él y el Monarca: "La situación en la que quedaba el país era de bloqueo absoluto y endosaba a la Corona la resolución de un escenario muy complejo. Enseguida nos reconocimos mutuamente como las personas que íbamos a sacar al país del riesgo de bloqueo ".
"En aquellos días intensos, Don Felipe y yo tuvimos la oportunidad de conocernos de verdad, en lo más personal, en una situación que ninguno de los dos buscábamos ni esperábamos, y en la que nos colocó la irresponsabilidad de otros", contó también Sánchez, que añadió a su vez: "La prueba de la relación estrecha que tejimos aquellas semanas me la dio unos meses después, cuando dimití como Secretario General. Me llamó para darme ánimo ".
Desmentido extraoficial
Sánchez contó a su vez que entre ellos surgió "una relación de complicidad que superó y sigue superando a día de hoy, lo institucional. Conectamos de una forma especial, confiamos el uno en el otro y se estableció una relación muy franca ".
Todas estas palabras provocaron malestar en Casa Real, y aunque no se desmintió nada, una fuente cercana señaló: " El Rey trata por igual a todos los políticos, en eso hay que tener muchísimo cuidado ". Él es una persona diplomática, amable y simpática por naturaleza y por profesión. Pedro Sánchez se ha creído una persona especial en el trato y eso solo ha ocurrido en su imaginación". En esa línea ha querido ir Jaime Peñafiel, que ha comentado en El Mundo que le ha llegado una información de una personalidad que frecuenta La Zarzuela que niega esta amistad: "Me ha confesado que todo lo que Sánchez cuenta de Felipe en su libro es... mentira".