Meghan Markle está imparable desde que llegó a la Familia Real Británica, acudiendo a diversos eventos, entre ellos algunos solidarios. Ahora ha dejado al descubierto sus buenas dotes en la cocina después de que haya acudido a su primer proyecto solidario desde que es uan royal. La Duquesa de Sussex ha respaldado el lanzamiento de un libro de cocina solidario, cuyos beneficios irán destinados a una asociación creada por mujeres que se vieron afectadas por el incendio que se produjo en junio en la torre Grenfell, dejando 72 muertes.
Meghan Markle, feliz de colaborar en la asociación 'Hubb Community Kitchen'En este proyecto solidario ha colaborado de diversas maneras, puesto que se ha encargado de escribir el prólogo del libro de recetas, y además se ha metido de lleno en la cocina para dar ejemplo y ayudar en una jornada normal del comedor social. Con un delantal de rayas y muy sonriente, así se ha dejado ver Meghan Markle según ha publicado la cuenta oficial de Instagram de Kensington Palace. Por otro lado, también ha dejado un vídeo en el que se habla del proyecto. Esta no es la primera vez que la mujer del Príncipe Harry visita esta asociación, puesto que el pasado mes de enero estuvo allí y desde entonces ha regresado regularmente para prestar su ayuda en la elaboración de algunos platos.
Fue el pasado verano cuando varias mujeres afectadas por el incendio de dicha torre -la mayoría musulmanas- se reunieron en el centro cultural musulmán Al Maanar, situado en West London, donde preparan comida a las personas más desfavorecidas. Poco después nació una asociación formada cada vez por más voluntarias, llamada 'Hubb Community Kitchen', y es que 'hubb' significa 'amor'.
Meghan Markle cocinando en la 'Hubb Community Kitchen'Esta misma comunidad ha escrito un libro de cocina llamado 'Together: Our Community Cookbook', recopilando recetas muy personales de mujeres de distintos puntos de Europa, África, Medio Oriente y un largo etcétera. En el prólogo aportado por Markle habla de cómo este proyecto empodera a las mujeres y también habla de las tareas cotidianas de la cocina, que consiguen -en este caso- fortalecer los lazos entre las distintas comunidades.
Ilusionada con el proyecto
Un extracto del libro dice así: "Inmediatamente me sentí conectada con esta cocina comunitaria; es un lugar para que las mujeres rían, lloren y cocinen juntas ", y Markle continúa diciendo: " La fusión de identidades culturales bajo un mismo techo, crea un espacio para sentir una sensación de normalidad -en su forma más simple, la necesidad universal de conectarse, nutrirse y comunicarse a través de la comida, a través de la crisis o la alegría- algo con lo que todos podemos conectar ".
