Para esta ocasión, el nieto de la Reina Isabel visitó el uniforme de Capitán General de los Royal Marines. Pero el último acto en representación de la Corona Británica se llevó a cabo el 9 de marzo con motivo de la celebración del Día de la Commonwealth. El Príncipe Harry y Meghan Markle se desplazaron hasta la Abadía de Westminster para el tradicional servicio religioso que se realiza en honor de la Mancomunidad de Naciones. Junto al matrimonio, otros miembros de la Familia Real Británica como el Príncipe Guillermo y Kate Middleton o la Reina Isabel.
Tras este acto, a partir del 1 de abril de 2020 los Duques de Sussex ya no tendrán que realizar actos institucionales representando a la Casa Real y podrán ser financieramente independientes y vivir retirados de la vida pública y el foco mediático, tal y como desean. Es por eso que Meghan Markle no pudo evitar emocionarse durante su despedida de todo el personal real de Reino Unido antes de volver a Canadá, mientras el Príncipe Harry continuará unos días más en el país para realizar sus últimos compromisos.
Una agridulce despedida
Además, Bryony Gordon también ha confirmado que Meghan Markle se tomó su papel muy en serio y que además de preparada, también se sentía muy orgullosa de entregar lo que se le pidiese, en este caso las becas de la Asociación de Universidades de la Commonwealth que ganaron 23 jóvenes estudiantes y académicos, una organización de la que Meghan Markle seguirá siendo patrocinadora tras su retirada de la Familia Real Británica. La Reina Isabel, por su parte, le ha dicho al Príncipe Harry que son muy queridos por la realeza y que les daría la bienvenida de nuevo su quisiesen volver en un futuro.