Los Duques de Sussex viajaron a Melbourne para seguir con el tour que están realizando por Australia.
El viaje de los Duques de Sussex por Australia sigue. Después de su paso por Sydney, donde recibieron los primeros regalos para el bebé que esperan y Dubbo, donde conocieron cómo es la vida en el interior del país, llegó el momento de poner rumbo a la segunda ciudad más poblada del país, Melbourne.
El Príncipe Harry y Meghan Markle empezaron la jornada con una visita al Jardín Botánico de Melbourne, lo que incluyó un saludo a las personas que se encontraban en las inmediaciones. Allí se pudo comprobar una vez más la expectación que levanta la pareja y que sigue despertando el hijo del Príncipe de Gales, que charló con una joven que tenía una pancarta en la que se leía que le amaba desde que tenía 8 años.El Palacio del Gobernador de Victoria, o en este caso de la Gobernadora, Linda Dessau, que acompañada de su marido, Anthony Howard, ofrecieron una recepción en honor a los Duques de Sussex. Fue aquí cuando se vio a Meghan Markle lucir embarazo por primera vez con un vestido azul marino ceñido. Además, la pareja se mostró muy cómplice, sonriente y feliz, dejando claro que siguen viviendo una luna de miel.
Un romántico paseo por la playa
El Príncipe Harry y Meghan Markle han probado comida tradicional australiana y han visitado la escuela primaria Albert Park, donde han tenido la oportunidad de reunirse con los escolares. Allí, los Duques de Sussex han aprovechado para hablar sobre su futura paternidad con los niños; en concreto, han comentado que les habían enviado una enorme lista de nombres, pero que les parece todavía demasiado pronto para elegir cómo se llamará su primer hijo.
También han cogido el tranvía para ir a South Melbourne Beach, donde han conocido a los vigilantes de la playa y a los niños que ejercen como voluntarios para mantener limpia la playa. Tras charlas con ellos, han dado un romántico paseo por la arena.