Los Duques de Sussex están dispuestos a hacer lo que haga falta para proteger a su hijo Archie. Si bien una de las causas de su salida de la Casa Real Británica fue dejar de exponer a su vástago, no van a dejar pasar ni una a quien atente contra la intimidad del cuarto nieto del Príncipe de Gales, aunque les cueste otro proceso judicial.
Así, Meghan Markle ha demandado a la agencia estadounidense Splash por unas fotografías tomadas el 20 de enero de 2020 cuando la Duquesa de Sussex daba un paseo con Archie Harrison y sus perros en Vancouver Island, donde residía en ese momento junto al Príncipe Harry. En las fotos no se podía ver la cara del pequeño, que iba en un portabebés y estaba bien protegido con ropa de invierno y se encontraba de espaldas a la cámara, que si captó perfectamente a la Duquesa de Sussex en un paseo por Horth Hill Regional Park en Vancouver Island en el que también iban sus guardaespaldas.
El Príncipe Harry y Meghan Markle entienden que las fotografías supone una violación de la privacidad y un mal uso de la protección de datos al haber sido vendidas a periódicos británicos. Como señala el Evening Standard, se afirma a su vez que las imágenes tomadas por Steve Dennett fueron tomadas sin el consentimiento de las personas que aparecen en ellas. La acusación señala también que antes de que se tomaran las imágenes familiares, el fotógrafo estuvo revisando la casa que ocupaban en aquel momento los Sussex y que por tanto no se encontraba en Horth Hill Regional Park por casualidad.
Por otro lado, la defensa de Splash señala que la Duquesa de Sussex sabía que estaba siendo fotografiada y que no cambió su actitud al descubrir que un paparazzi estaba tomando fotos de ella y de su hijo.
Guerra contra la prensa
El Príncipe Harry y Meghan Markle no han dudado en emprender una guerra contra la prensa, o más concretamente contra determinado tipo de prensa que siente que ha ido contra la pareja. Uno de sus grandes enemigos en Daily Mail, medio que publicó la carta que la Duquesa de Sussex escribió a su padre, Thomas Markle. Es sin duda uno de los episodios que más dolor han provocado a Meghan Markle, que lejos ya de la Casa Real Británica está dispuesta a luchar acompañada por el Príncipe Harry.