Meghan Markle ha comentado durante su participación en New York Times Deal Book por su implicación en asuntos políticos, ya que está haciendo todo lo posible por conseguir que se apruebe un proyecto de ley por el que en Estados Unidos habría derecho a un permiso de paternidad y maternidad remunerado. " Sólo consigo los números de teléfono, llamo y tengo una conversación", aseguró sobre la labor que está realizando entre los miembros del Congreso de los Estados Unidos para impulsar este proyecto.
En este sentido, la Duquesa de Sussex, añadió que se necesitan hombres fuertes, modernos y capaces de comprender realmente que ellos también se benefician y que no se trata solo de la madre. "Creo que este es uno de esos problemas que afectan a todo el mundo. Todos podemos estar de acuerdo en que las personas necesitan cierto apoyo cuando acaban de tener un hijo. Este no es un problema político, sino humanitario ", aseguró.
Una luchadora incansable
Meghan Markle nació en Los Angeles, aunque ha vivido en Canadá y Reino Unido. Por eso, cuando regresó a Estados Unidos siendo madre, no encontraba el sentido a que la administración no le ofreciera ningún tipo de ayuda para poder conciliar su vida familiar y laboral. La Duquesa de Sussex ha reconocido que la Familia Real Británica no suele involucrarse en política pero que veía este como un derecho fundamental.
El Príncipe Harry y Meghan Markle con su hijo Archie en SudáfricaDurante la citada cumbre, también ha querido comentar su compromiso permanente con los derechos de la mujer, recordando que cuando solo tenía 11 años llamó a una importante empresa internacional que anunciaba un lavavajillas "para las mujeres de todo Estados Unidos", consiguiendo que el anuncio se deshiciera de este tono machista y acabara anunciándose "para las personas de todo Estados Unidos", ilustrando con esta anécdota la decisión de publicar esta carta abierta en favor del permiso de maternidad remunerado y telefoneando a cuantos representantes políticos le ha sido posible.
La Duquesa de Sussex reconoce que incluso antes de tener ningún privilegio en su vida, cuando su forma de vida era muy diferente, siempre defendió lo que consideraba correcto y señaló la existencia de un estudio en el que el 60% de las mujeres aseguraban preferir hablar de los detalles de su propia muerte que de dinero: "No hay nada de malo en hablar sobre el éxito de una mujer, su ambición o su destreza financiera", aseguró.
