La boda de Marta Luisa de Noruega y Durek Verrett contó con 350 invitados que disfrutaron de una fiesta que duró 3 días en Geiranger, un precioso lugar en Noruega en el que los Reyes Harald y Sonia habían celebrado su 25 aniversario de casados. Entre esos invitados estuvieron los Reyes de Noruega, los Príncipes Haakon y Mette-Marit, la Princesa Ingrid Alexandra, el Príncipe Sverre Magnus, que presentó oficialmente a su novia, Amalie Giaever Macleod, y la Princesa Astrid.
Además, la realeza europea estuvo representada por Victoria y Daniel de Suecia, Carlos Felipe y Sofia de Suecia y por Constantino y Laurentien de Holanda, nada mal teniendo en cuenta que la segunda boda de la Princesa Marta Luisa no tenía un perfil demasiado royal.
El enlace no ha estado exento de polémica, y no solo por las controversias generadas por el novio, Durek Verrett, sino por algunas decisiones tomadas por los contrayentes, que vieron en su boda una ocasión para hacer caja. Vendieron su enlace a ¡Hola! y Hello!, e incluso a Netflix, que ha grabado un documental, lo que provocó que los miembros de la Casa Real dejaran claro que no iban a posar para una exclusiva y que se iban a dejar fotografiar por toda la prensa.
Además, se han filtrado algunos detalles que muestran el perfil comercial de la boda. Como indica SE og HØR, durante los festejos se instaló una tienda en la que se vendía ropa de Hést, la marca de ropa que la Princesa Marta Luisa creó con Monica Utne y Anne-Kari Bøhaugen.
No se sabe si alguno de los invitados se animó a comprar algo o no, pero sí que la pareja hizo promoción al aparecer en uno de los actos nupciales con modelos de la firma en la que se veía bien el logo.
Por otro lado, y a pesar de que han facturado con su boda, quisieron ahorrar en algunos detalles. Si bien tiraron la casa por la ventana con detalles como organizar un crucero por el fiordo de Geiranger, no fueron demasiado espléndidos con el alcohol.
Copas a 19 euros
Como detalló el citado medio, los invitados recibieron cinco vales para bebidas que les debían durar dos noches en el Hotel Union de Geiranger. Si bien lo habitual es que tras el banquete haya barra libre, en este caso se decidió limitar los tickets. Los asistentes tuvieron así 5 bebidas para la fiesta de La Habana del viernes 30 de agosto de 2024, y para la que tuvo lugar tras el banquete de bodas del sábado 31 de agosto.
Eso no quiere decir que tras tomar las cinco copas no hubiera opción de beber más si era el deseo del invitado, sino que luego ya debía pagarlas. Entre el catálogo, por supuesto, la ginebra OHD Pink Gin nupcial de la pareja, otro asunto polémico por el que sacaron dinero extra. ¿El precio? 225 coronas noruegas, lo que vienen a ser 19 euros.