Un tiempo después, Marius Borg decidió emitir un comunicado para reconocer que ejerció violencia contra la mujer y pedir perdón a la víctima. "Cometí lesiones corporales y destruí objetos en un apartamento en estado de ebriedad con alcohol y cocaína después de una discusión", explicaba el hijo de Mette-Marit.
Después, tras asumir que tiene problemas de adicciones, el acusado asumió su colaboración en la investigación policial. "Quiero ser responsable de lo que he hecho y daré explicaciones sinceras a la policía", decía. No obstante, parece que este caso de violencia no es el único que Marius Borg habría cometido contra una pareja.
El testimonio de dos exnovias
Ahora, según lo que han dicho los abogados de ambas para el periódico noruego Dagbladet, una vez escuchadas las versiones de las chicas, sus casos pasarán a investigarse por separado y como casos de violencia de pareja. De esta manera, la polémica en torno a la Familia Real Noruega sigue y la Princesa Mette-Marit sigue sin pronunciarse a pesar de se sabe por el portal noruego Aftenposten que la Princesa heredera consorte se ha puesto en contacto con la primera víctima.