Tras el Desfile Militar, los Reyes de España abrieron el Palacio Real de Madrid a invitados de diversos sectores con los que celebraron la Fiesta Nacional.
Tras finalizar el Desfile Militar en la madrileña plaza de Cánovas del Castillo con motivo del Día de la Fiesta Nacional, Don Felipe y Doña Letizia se dirigieron, escoltados por el Escuadrón de Escolta Real, hasta el Palacio Real de Madrid, donde se celebró la tradicional recepción en el Salón del Trono. Allí, saludaron al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que llegó con su esposa, Elvira Fernández Balboa; a los representantes del Cuerpo Diplomático, así como a los representantes de los tres poderes del Estado y gobiernos autonómicos hasta un total de casi 2.000 invitados, pertenecientes a todas las esferas sociales de la vida pública nacional.
Así, podemos destacar caras nuevas en esta recepción como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes y la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, que llegó junto a su marido, Eduardo Leira. También caras ya habituales como la de Jesús Posada, presidente del Congreso; Susana Díaz, presidenta de la Comunidad de Andalucía; el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla; Esperanza Aguirre y la Defensora del Pueblo, Soledad Becerril.
Entre los representantes de la vida social y cultural que se dieron cita, destacar a Alfonso Martínez de Irujo, hijo de la fallecida Duquesa de Alba; la empresaria Paloma Segrelles; la presentadora Mariló Montero, que lució un aspecto radiante con un traje pantalón blanco; el empresario Juan José Hidalgo y el periodista Manuel Campo Vidal.
El gran ausente en esta recepción fue el líder de Podemos, Pablo Iglesias, quien por un error en el correo electrónico no le llegó la invitación en la fecha que se esperaba. Tras intentar solventar este error por parte de la Casa Real, Iglesias se negó a participar en este acto, aunque sí lo hizo el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, así como el líder del PSOE, Pedro Sánchez, que contó con la presencia de su esposa.
Después de estos saludos, se dirigieron hasta el Comedor de Gala, donde se celebró la recepción y donde tuvieron lugar los habituales corrillos en los que se habló de las elecciones en Cataluña y las generales del 20 de diciembre. Con esta recepción, se celebró el día de la Fiesta Nacional, una conmemoración que coincide con la fecha histórica en la que España llegó a América. Es, por tanto, una efeméride histórica en la que España, a punto de concluir un proceso de construcción del Estado a partir de nuestra pluralidad cultural y política, y la integración de los reinos de España en una misma Monarquía, inicia un período de proyección lingüística y cultural más allá de los límites europeos. Doña Letizia lució el vestido con el que ya se le había visto durante el desfile, aunque se desprendió de la chaqueta del conjunto del diseñador Felipe Varela. Se trata de un vestido de manga corta y hasta la rodilla en doble crepe de lana y con cinta de terciopelo negra a juego con los zapatos. Su peinado consistía en un recogido bajo, muy favorecedor.
Como curiosidad destacar que tras la recepción, el Palacio Real abrirá sus puertas al público hasta las 23:00 horas para que así todo el que lo desea pueda ver de una forma gratuita el edificio histórico. También abrirán sus puertas los museos gestionados por el Ministerio de Cultura y es que desean que el público en general disfrute de la Fiesta Nacional de España.