María Zurita es la prima paterna del Rey Felipe más mediática con diferencia. De su hermano Alfonso Zurita, poco se sabe, mientras que los Gómez-Acebo son bastante conocidos, pero no llegan al nivel de la hija de la Infanta Margarita, que es la de que más datos se conoce. Además, el nacimiento de su hijo Carlos en 2018 le hizo todavía más abierta y accesible.
Eso sí, lo de conceder entrevistas no es muy habitual, pero ella ha decidido hacerlo sentándose con Susana Macpherson y Mercedes Martel para su programa de entrevistas en Youtube 'Diez minutos con Mercedes y Susana'. Para empezar, la aristócrata comentó que llevaba la pandemia "con resignación, con miedo, con mucha paciencia, deseando que se acabe ya". Además, reveló que tuvo coronavirus: "He pasado el covid, lo pasé muy al principio. Me quedé sin olfato y sin gusto, pero nada, de puntillas. Tuve muchísimos anticuerpos, no sé si los sigo teniendo o no".
Preguntada por su trabajo como traductora, explicó lo que le llevó hasta que fundó su propia empresa: " Desde pequeña quise ser psicóloga infantil. Cuando llegó la hora de la carrera, me metí en eso, en la Universidad de Comillas, en el ICADE. Duré un año, era todo matemáticas, que yo... los números y yo no somos compatibles. Yo no me quería meter en una cosa en la que se metía todo el mundo, que en mi época era derecho o empresariales, y acababan de implantar en Madrid como licenciatura Traducción e Interpretación, y ahí me metí. Me encantan los idiomas., soy buena, hablo muchos, se me dan bien y así empecé ", confesó también.
"Terminé la carrera, me habían cogido para un puesto en Nueva York de Colgate, que tuve que rechazar por motivos familiares, y entonces hablando con unas amigas que acababan de montar una empresa de traducción y me puse a trabajar con ellas. Estuve dos años, todas hacíamos un poco de todo. Al cabo de los dos años vi que necesitaba avanzar y monté mi empresa, Zesauro. No toqué sus clientes, me llevó los que yo había aportado y así empecé", añadió, comentando también que habla seis idiomas, aunque dos de ellos se le han olvidado : "El alemán, que es absolutamente imposible, y el italiano, que si fuera una semana a Italia lo recuperaría".
Así aprende Carlitos
En cuanto a la maternidad, ha confesado que para ella es "la palabra amor en todas sus variantes. El amor más puro que haya sentido nunca, infinito, incondicional, da igual lo que haga el niño, lo vas a querer igual. Me he vuelto más paciente, más comprensiva, más empática, más generosa. Tu orden de prioridades da un vuelco, es otro. Llevaba soltera y libre en todos los aspectos muchos años. En global es la mejor experiencia que he tenido ". Confesó además que se organiza muy bien con todo porque es muy metódica y organizada, pero que también tiene mucha ayuda: "Organización y mucha ayuda. Vivo en casa de mis padres, que aunque estoy allí para ayudarles a ellos, ellos a mí me ayudan infinito ".
Manifestó que a pesar de todos los idiomas que habla solo se comunica con Carlitos en español, porque "una persona que le habla en dos idiomas al niño le crea confusión. Es mejor un idioma, una persona. Va a un colegio católico británica y lo distingue perfectamente". Lo curioso fue cuando habló sobre cómo Carlitos aprende historia de España desde el salón de casa gracias a las fotos familiares: "Desde pequeñito llevaba al niño al salón y empecé a explicarle, en vez de contarle cuentos de fantasía, ya que tenemos la historia colgando, pues se la cuentas. El niño tiene mucha memoria y se acuerda y le dices. Alfonso XIII, no sabe quién es, pero lo sitúa. Quién es Mimi, que era mi abuela, que tenemos un cuadro en el salón. Con mi padre es muy fácil porque se lo está enseñando, quiero que mi hijo aprenda la historia de una forma fácil, y al final es su familia, es su historia. No es solo la historia, es su historia. Hay un poquito de historia en mi casa", añadió María Zurita, que reveló que su padre, Carlos Zurita, se implica mucho en la educación de su nieto. Finalmente, habló sobre su colaboración con la Fundación A LA PAR, que "es una fundación que se dedica a ayudar a dar trabajo a niños con discapacidad", y con la Fundación Madrina, que ayuda a mujeres en situaciones muy límites. Asimismo, implica ya a su hijo Carlitos, al que le inculca que tiene que ser generoso y donar a los que menos tienen.