La pandemia ha llevado a la Reina Margarita de Dinamarca a tomar un decisión que ya tenía un precedente.
Cada Casa Real tiene sus propios actos que se celebran año tras año. Si la Familia Real Británica festeja cada segundo sábado de junio Trooping the Colour, la Familia Real Española preside el Día de la Hispanidad o la entrega de los Premios Princesa de Asturias o la Familia Real Sueca se engalana con motivo de los Premios Nobel, la Casa Real Danesa recibe el Año Nuevo con una recepción en el Palacio de Amalienborg.
Cada 1 de enero, la Reina Margarita y el resto de miembros de la Casa Real Danesa se visten de gala para este acto en el que participan los miembros del Gobierno y otras autoridades. Sin embargo, en 2021 no será posible debido a una pandemia que no solo se resiste a remitir, sino que se recrudece en Europa a medida que avanza el otoño de 2020.Es por eso que la Casa Real Danesa ha tomado esta decisión de la que se ha informado a través de un comunicado: "Como resultado de la continua propagación de la COVID-19 en Dinamarca, Su Majestad la Reina ha decidido cancelar la recepción de Año Nuevo para el Gobierno y los representantes oficiales de Dinamarca y la Corte el 1 de enero de 2021", señala la nota divulgada por la Casa Real Danesa. No habrá evento con el Cuerpo de Oficiales, el Cuerpo Diplomático, las Fuerzas Armadas y la Agencia Danesa de Emergencias, así como los actos fechado para los días 4 y 5 de enero en los que la Reina Margarita se había comprometido con las entidades y organizaciones con las que colabora como patrona real.
A cambio, habrá una pequeña recepción de Año Nuevo en el Palacio de Christiansborg el 4 de enero de 2021 para el Primer Ministro y otras autoridades. Por supuesto sí se emitirá el tradicional discurso de Año Nuevo que la Reina envía al país cada 31 de diciembre. El mensaje tendrá lugar a las 18:00 horas del 31 de diciembre de 2020. Dos cancelaciones en casi medio siglo
La cancelación de un acto tan importante en la agenda institucional como la recepción de Año Nuevo solo había tenido lugar una vez en el reinado de Margarita II de Dinamarca, que comenzó el 14 de enero de 1972. Sucedió el 1 de enero de 2005. En aquella ocasión se debió como señal de duelo por el tsunami del sudeste asiático del 26 de diciembre de 2004.