Según él mismo ha declarado en la entrevista: "La única persona que conoce la verdad sobre lo que les pasó a mis primas Latifa y Shamsa es la Princesa Haya. Espero que aproveche el caso judicial para contar al mundo cómo han sido tratadas. Tiene la oportunidad de hacer algo bueno por esas pobres mujeres. Ni a un animal le trataría de la manera en la que ellas han sido maltratadas".
Y es que Marcus Essabri ha sido un gran apoyo para las Princesas Latifa y Shamsa, ya que en 1999 recibió una llamada telefónica de Shamsa en la que le confesaba toda la verdad sobre su vida en Palacio. En la conversación la hija del emir le contaba a su primo que estaba harta de las mentiras de Palacio y los planes que tenía para escapar. Ante estas declaraciones, el británico se puso en contacto con Haya de Jordania para mediar en la situación aunque no surtió efecto.
Una dura vida en Palacio
El sobrino del emir de Dubái también ha contado su dura historia ya que aunque ahora aparentemente sea un hombre, Marcus Essabri nació como una mujer. Con tan solo 12 años se trasladó a Londres donde comenzó su trasnformación de género para convertirse en la persona que él verdaderamente sentía. En su entrevista al programa australiano el sobrino del emir ha realizado unas duras declaraciones sobre su proceso personal: "Si me hubiera quedado allí, no creo que hubiese sobrevivido".