Galería: La Familia Real Española en imágenes
El Rey Juan Carlos no tuvo una infancia tranquila ni una juventud fácil, estando ambas etapas marcadas por ser quien era y por la situación que vivía España, gobernada por el dictador Franco. Finalmente logró ser el Rey de todos los españoles, pero tampoco fue fácil. Con la Democracia consolidada y en tiempos de prosperidad, Felipe VI pensó que podría tener un reinado tranquilo, pero se equivocaba. La crisis económica y los escándalos que afectaron de lleno a la Corona dejan a la que un día fue una Institución valorada en un estado tan complicado, que necesitó renovarse a fondo, empezando por cambiar a la cabeza visible.
El Rey Felipe VI ofrece su primer discurso tras ser proclamado Rey de EspañaEl 19 de junio de 2014, Felipe VI subió al Trono de España y logró la gesta de reflotar la imagen de la Monarquía, aunque el trabajo todavía no ha terminado y queda mucho por hacer para que la Corona recobre el esplendor de aquellos años de reinado de Juan Carlos I en los que aprobaba con muy buena nota. Los años han ido pasando, y aunque la crisis mejoraba y los escándalos se iban diluyendo, a excepción del Compi Yogui, donde la damnificada fue la Reina Letizia, Felipe VI seguía sin poder relajarse.
El otoño de 2017 fue muy malo para Don Felipe. El 3 de octubre de 2017 ofreció un duro discurso para responder a lo sucedido en el referéndum ilegal de Catalunya celebrado dos días antes. Estaba siendo criticado ante su desaparición pública, pero lo tenía todo medido. El texto fue aplaudido por un sector de la población, pero criticado por otro, sobre todo en Catalunya. Perdió además el favor del líder de Podemos, Pablo Iglesias, que desde entonces ha criticado abiertamente a la Corona.
Aunque le duela que la relación entre su mujer y su madre sea tensa o que sus hijas tengan más trato con una abuela que con la otra, una cosa es sufrirlo en la intimidad y otra que el mundo entero vea cómo tu esposa hace un desplante a tu madre y tu hija mayor tenga también gestos extraños con su abuela. El mazazo fue enorme y el escándalo, brutal. Si bien es cierto que la complicada relación entre la Reina Letizia y su familia política era un secreto a voces, fue un shock verlo, y más en un acto público.
La Familia Real fue la comidilla de todo el mundo, con el consiguiente perjucio para la Corona. El enfado del Rey fue mayúsculo, tanto a nivel personal como institucional. Luego llegó la reconciliación pública y las cosas han seguido como si nada... pero ahí queda eso. Por si fuera poco, se metió por medio Marie Chantal de Grecia, la mujer del que era su primo favorito, el Príncipe Pablo, que criticó públicamente la actitud de Doña Letizia. Esto también ha provocado un problema entre los primos, otro disgusto para un hombre conciliador a quien no le gustan los conflictos y que acaba siendo arrastrado por culpa de los demás.
Felipe VI llamó al orden, se impuso como Jefe de la Casa Real y por tanto de la dinastía, y las cosas se han ido calmando. No obstante, la pareja real tuvo que hacer frente a los rumores de divorcio surgidos después del conflicto entre suegra y nuera. No, no se divorcian, al menos por ahora, el matrimonio de Don Felipe y Doña Letizia sigue fuerte. No todo va a ser malo en la vida del Rey.
